Por Gabriel Sanchez*
Desde hace unos días dejaron de estar disponibles las moratorias para aquellas personas que estaban en edad jubilatoria pero que no llegaban con los 30 años de aportes necesarios.
Es decir, los hombres mayores de 65 y las mujeres mayores de 60, que no tenían la cantidad de años aportados al sistema provisional, tenían la posibilidad de comprar dichos aportes a través de las moratorias y de esta manera poder acceder al menos a una jubilación mínima que al dia de hoy es de $323.232 (incluyendo el bono de 70 mil pesos otorgado por el estado).
Esta medida tiene un impacto significativo en materia previsional, teniendo en cuenta que en 2024 el 75% de las personas que se jubilaron lo hicieron a través de alguna moratoria para poder acceder a la jubilación mínima.
Con este escenario la única alternativa viable actualmente para las personas que no cuenten con los años de aportes necesarios, es acceder a la Pensión Universal para Adultos Mayores (PUAM) que representa el 80% de la jubilación mínima, haciendo aún más complicado llegar a fin de mes con esos ingresos, esto sin contar que la edad para poder acceder a dicha pensión es a los 65 años independientemente si sos hombre o mujer.
Por este motivo y sumado a un régimen previsional que cuenta con varias grietas (monotributistas y autónomos percibiendo la mínima sin importar la categoría que tengan, una jubilación máxima que en muchos casos no alcanza para mantener el estilo de vida actual para los que tienen ingresos más altos, prestación médica de PAMI con falencias), hizo que empezaran a tomar mayor protagonismo una herramienta de ahorro que tiene varias décadas en el mercado, y que funciona como un excelente complemento para la etapa de retiro: los seguros de ahorro.
AHORRO Y RESCATES
Estos seguros no sólo ayudan a generar un ahorro para la etapa de retiro, sino que además permiten hacer rescates parciales (retiros de dinero) durante los años de aportes. Una de las mayores ventajas que tiene es su sistema de ahorro, ya que es algo metódico considerando que son ahorros mensuales y que se realizan por débito, pueden realizarse en pesos o en dólares, y lo mejor de todo es que hoy en día se puede acceder desde montos muy accesibles (hay compañías en las que podes ahorrar desde $15.000 por mes).
Para aquellas personas alcanzadas por el impuesto a las ganancias son deducibles de la base imponible de dicho impuesto, no son embargables, y son heredables (se designa uno o más beneficiarios) sin necesidad de sucesión.
La finalidad de estas herramientas no es reemplazar ninguna inversión, sino actuar como un complemento a largo plazo que permita de manera ordenada y segura (cabe mencionar que están reguladas por la Superintendencia de seguros de la nación) acumular un capital ahorrado para destinar a algún proyecto, o bien para no depender el día de mañana únicamente de la jubilación del estado.
Por último lo recomendable, para este sistema de ahorro o para cualquier otro, es comenzar a hacerlo de manera planificada y con tiempo, a fin de alcanzar el objetivo propuesto de manera ordenada y de acuerdo a las posibilidades de ahorro actuales.
* Licenciado en Administración de Empresas. Planificador Financiero.