La Comisión de Acuerdos del Senado dictaminó favorablemente los pedidos de ascensos para los jefes de Estado Mayor del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea designados por el presidente Javier Milei. Se trata, respectivamente, del general Carlos Alberto Presti, el contralmirante Carlos María Allievi y el brigadier Fernando Luis Mengo. Los tres oficiales superiores se encuentran en funciones desde enero de este año y su promoción al rango inmediato superior debe ahora ratificada en la próxima sesión por el plenario del cuerpo.
La comisión dio luz verde, asimismo, a un total de 120 ascensos en el Servicio Exterior de la Nación y más de 300 ascensos de oficiales superiores de todos los escalafones de las tres Fuerzas Armadas.
En el caso del Ejército hubo, no obstante, una excepción la del coronel Pablo Francisco Depalo, sancionado en mayo pasado por un ritual castrense en el que se bañó con sidra y cal viva a quienes finalizaron el curso de paracaidistas. Por ese episodio se dio intervención a la Justicia y once militares de distinta graduación fueron suspendidos.
También fue objetada por parte de la senadora kirchnerista la promoción del vicecomodoro médico Rubén Daniel Algieri por presunto acoso sexual y laboral. Ese militar había sido impugnado en 2022, pero el Ministerio de Defensa nunca contestó oficialmente el pedido de informes requerido por la Cámara alta. La presidenta de la comisión, Guadalupe Tagliaferri (PRO) aclaró que no había una denuncia formal y que dos años atrás el enlace de la Fuerza Aérea en el Congreso había entregado un descargo extraoficial, pero Anabel Fernández Sagasti insistió en que se requiriera nuevamente un pronunciamiento oficial de la cartera de Defensa.
Entre los pliegos de Cancillería se presentó un caso similar con el diplomático Mariano Vergara, impugnado a instancias del kirchnerismo. El libertario Ezequiel Atauche aclaró que se había desestimado la denuncia según un documento en su poder, pero a pedido del radical Martín Lousteau se acordó pedir nueva información al ministerio de Relaciones Exteriores.
En otro orden durante el debate Fernández Sagasti calificó de “irregularidad”, “atropello” y “fuera de derecho” la reelaboración por parte de la actual junta calificadora de la Cancillería de la lista de pedidos de ascenso remitidas desde 2021 al Senado que habían quedado sin tratamiento.
El hecho fue consecuencia de que durante el anterior gobierno el bloque kirchnerista no trató los pliegos remitidos por Alberto Fernández por decisión, según trascendió, de la entonces vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El oficialista Juan Carlos Romero destacó esa circunstancia y consideró una “trivialidad” el “escándalo” que a su parecer pretendía promover Fernández Sagasti. Afirmó que si el entonces oficialismo hubiese cumplido con su tarea la junta calificadora no hubiera podido reelaborar la lista de ascensos del cuerpo diplomático.