Se la llevaron arriba de una camilla, acostada y tapada con una mantas. Así fue como detuvieron a la falsa médica Giselle Rímolo en un trámite que duró más de cuatro horas. La acusada sigue internada en el hospital, por su delicado estado de salud. En su segunda detención terminó con uncuadro de estrés postraumático, por una brutal agresión que sufrió en el penal de mujeres de Ezeiza.
"El lunes, pedimos al tribunal una detención domiciliaria basada en el incidente de salud de ella", informó el abogado de Rímolo, Roberto Schlagel, en diálogo con TN. Asimismo, explicó que la Justicia determinó que por la gravedad de su situación fue internada en una institución médica. Por esta razón, una ambulancia ayer la trasladó desde su casa a las 19.30 rumbo al Sanatorio Otamendi de Recoleta.
Según contó, su clienta tuvo entre el martes y el miércoles un brote psicótico en el que terminó con una lesión importante por una caída. Esa misma herida se le infectó y cuando llegó la policía la encontró postrada en su cama, inconsciente y con 40 grados de temperatura.
“Tiene un cuadro psiquiátrico de estrés postraumático por una agresión en el penal”, explicó sobre el episodio que vivió la expareja de Silvio Soldán en su segunda detención en el 2004. Cuando llegó al pabellón por primera vez les prometió a sus compañeras que las iba ayudar económicamente cuando saliera. "Ella dijo eso por las presiones que sufría y se olvidó después de que la liberaron porque pensó que nunca más iba a quedar detenida”, explicó.
Después de que volvió a caminar por el mismo pabellón, las internas la reconocieron y se vengaron por la promesa incumplida: le arrancaron el pelo y la agredieron sexualmente con una escoba. "Terminó casi pelada y la habían agredido analmente y vaginalmente con un palo de escoba, tenía serias lesiones internas, ginecológicas", relató el abogado.