La reunión entre representantes de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y de la Unión de Obreros de la Construcción (UOCRA) de San Nicolás y directivos de la empresa Siderar, que se realizó este mediodía, pasó a un cuarto intermedio, informaron fuentes de la cartera laboral.
El encuentro que comenzó este mediodía entre representantes de la UOM y la UOCRA de San Nicolás, a raíz del conflicto originado por la decisión de echar a 1.200 empleados, pasó a cuarto intermedio. La conciliación obligatoria vence en 9 días. Cristina llamó a "utilizar todos los mecanismos legales para defender las fuentes de trabajo".
Del encuentro que se desarrolló en la sede del Ministerio de Trabajo, Alem al 600, por espacio de dos horas y que fue encabezado por la viceministra de la cartera laboral, Noemí Rial, participaron el secretario General de UOCRA San Nicolás, Carlos Romero; y el titular de UOM, Naldo Brunelli y representantes de la empresa.
El secretario de Prensa de la UOM San Nicolás, Luis Sánchez, señaló a Télam que la reunión se desarrolló en el marco de la conciliación obligatoria dictada el último 9 de enero por el Ministerio de Trabajo por un plazo de 10 días hábiles.
Sánchez explicó que el conflicto surgió a principios de diciembre último a partir del anuncio de la empresa Siderar de despedir a unos 1.200 trabajadores (1.000 de la UOCRA y 200 de la UOM) que se desempeñan en la reparación de los altos hornos de la planta de San Nicolás.
Por su parte, el director General de Ternium Siderar, Martín Berardi, defendió la necesidad de "ajustar la producción" de acero en el contexto de crisis internacional, y que por eso la empresa anunció la discontinuidad de los contratos de 1.200 empleados que trabajaban en una obra.
En declaraciones, Berardi señaló la necesidad de "ajustar la producción" de la industria, ya que "el contexto es que el mundo colapsó", en referencia a la crisis financiera internacional.
Aclaró, sin embargo, que "el plan de largo plazo de Siderar está intacto".
Explicó que el anuncio de cesantía de 1.200 empleados corresponde a parte de los 2.400 trabajadores de empresas contratistas que Siderar había convocado para una obra de infraestructura de renovación de la tecnología de los altos hornos.
"Esta obra se hubiese ejecutado si no hubiese habido crisis y hubiese terminado más o menos el 10 de febrero. La fuimos reprogramando y nos íbamos ahora hasta mayo o junio. Es un problema de timing, es decir, acá no hay ningún condimento político", aseguró el directivo.
En tanto, ayer, el diputado justicialista José María Díaz Bancalari, oriundo de San Nicolás, dijo que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se pronunció a favor de "utilizar todos los mecanismos legales para defender las fuentes de trabajo" en el conflicto, durante un encuentro en el chalet presidencial de Olivos, el lunes.