Cultura

Renovado entusiasmo para marchar por la vida

Con renovado entusiasmo se realizó la 10ª Marcha por la Vida, "en honor al niño por nacer", el sábado 29 de marzo, en un recorrido de unos tres kilómetros a través de la avenida del Libertador General San Martín, desde Plaza Italia hasta la plaza Rubén Darío, contigua al Museo Nacional de Bellas Artes.

Numerosas pancartas -en su mayor parte hechas a mano por quienes las portaban- reclamaban el fin del aborto y la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural. "Defendamos a los que no tienen voz", "Si quieres la paz, defiende la vida", "Los niños que están en el vientre de la madre también son argentinos", "Salvemos las dos vidas", "Dejen de matar argentinos", "Unidos por la vida", "Soy mujer, soy pro vida", "Pro mujer, pro amor, pro vida abundante", eran algunos de los lemas que podían verse en esos improvisados carteles.

"Patria sí, aborto no, Berazategui, Quilmes, Florencio Varela por las dos vidas", decía un gran cartelón de tela que llevaba un grupo de esa procedencia. Una mujer lucía en su remera la leyenda "Yo soy mamá de una persona con autismo". Comentó que su hijo tenía ahora 21 años. Y llevaba una pancarta que decía: "Gracias a la mujer que no abortó a mi hijo. Nueva ley de adopción.

María Mesones de Repila, de 53 años, madre de cuatro hijos, había confeccionado un gran cartel en cartón que decía: "Matar no es un derecho. Adopción es la opción". Contó que uno de sus hijos, cuando tenía 12 años, por mantener una postura pro vida era objeto de bullying por chicas amigas que iban a colegios católicos. Impactado por lo que escuchó decir en la televisión a un abogado pro vida, advirtió cómo podía fundamentarse jurídicamente el derecho del niño por nacer y decidió defender su postura estudiando derecho, carrera de la que cursa el tercer año con excelentes notas.

"Yo vine siempre a esta marcha", dijo Magdalena, de 23 años, maestra, que había venido en tren desde Bella Vista con Ayelén, de 28, una compañera de un grupo parroquial, que estudia terapia ocupacional y trabaja como niñera. "Aborto=muerte" decía uno de sus carteles.

Más allá, dos chicas jóvenes llevaban también sus carteles escritos con resaltadores y buena letra sobre cartón. "Pesa menos un niño en brazos que en la conciencia", decía el que llevaba Graciela, de 20 años. "La esclavitud también era legal", decía el que llevaba Fátima, de 27 años.

Pero lo que más abundaba eran banderas argentinas. Sobre la verja del zoológico se había colocado una bandera argentina de unos treinta metros de largo con la leyenda de fondo "El acto más revolucionario es formar una familia". A un costado, un cartel más chico decía "Movimiento Revolucionario Tercera Posición" y las fotos de tres muertos (Darwin Passaponti, joven nacionalista asesinado el 17 de octubre de 1945; Felipe Vallese, obrero metalúrgico desaparecido el 23 de agosto de 1962, y José Ignacio Rucci, sindicalista, secretario general de la CGT, asesinado el 25 de septiembre de 1973). Pero fuera de ese caso, no hubo carteles ni banderas de agrupaciones políticas.

ORGULLOSAMENTE ADOPTADO

Se vio sí participando a algunos exdiputados nacionales como Jorge Enríquez, Cornelia Schmidt-Liermann y Cynthia Hotton; a la presidenta del Partido Demócrata Cristiano de la Ciudad, María Alejandra Muchart, y al secretario de Educación, Doctrina y Valores de esa agrupación, Andrés González Balcarce; a María Eugenia Talerico, exsubdirectora de la Unidad de Información Financiera (UIF), quien aspira a ser diputada por la provincia de Buenos Aires; a Juan Carlos Neves, del partido Nueva Unión Ciudadana, de esa provincia; a la diputada nacional por la Capital María Fernanda Araujo y a otras figuras, pero todas a título personal, no en grupo.

Estaban también el abogado constitucionalista Alfredo M. Vítolo, especialista en derechos humanos y garantías; el abogado Gerardo Palacios Hardy, presidente de la Academia del Plata; varios médicos con sus guardapolvos, entre ellos, Jorge Correa Morales, Ernesto Beruti, Viviana Abad Monetti y Leandro Rodríguez Lastra; la vicepresidenta de Misiones Rurales Argentinas, Soledad Paz, con la expresidente Lula Gallardo; el abogado Alberto Solanet, etc. El presidente de la Confederación Argentina de Exalumnos de la Educación Católica (Confaecc), Xavier Prieto Astigarraga, estaba con integrantes de esa entidad.

El periodista Víctor Balseiro, conductor del programa Almas con historia, en Radio Grote, llevaba en su pecho la leyenda "Orgullosamente adoptado", referida a su historia personal. El pastor evangélico Gabriel Ballerini iba caminando junto a Evelyn Rodríguez, impulsora de la Red Nacional de Acompañamiento a la Mujer con Embarazo Vulnerable (0800-333-1148).

CONSULTA POPULAR

Un largo grupo caminaba acompañando el rezo del rosario, guiado por un sacerdote. Había un fuerte sol, pero a la vez una brisa fresca que aliviaba el paso. Un hombre, Daniel Camponovo, sostenía un cartel pidiendo una consulta popular para sacar el aborto. Estimaba que, aunque no fuera vinculante, mostraría el rechazo de gran parte de la sociedad a una ley sancionada casi imprevistamente hacia el final de un año de aislamiento por el coronavirus. Trajo a colación palabras del actual presidente Javier Milei, que el 15 de agosto de 2023 se mostró partidario de una consulta popular al respecto, en el programa Somos buenos, de Nicolás Wiñazky, en TN, mientras ya ha habido -agregó el manifestante- unos 100.000 abortos realizados durante su gobierno.

No faltaban matrimonios con hijos en cochecitos. Había una chiquita de siete años en una silla de ruedas. Catalina nació con espina bífida, explicó su mamá. La chica miraba todo con vivo interés; llevaba la silla otra chiquita, hija de su madrina.

Llegada la marcha a su punto final, el público se reunió alrededor de un estrado al aire libre, donde estaba tocando un conjunto folklórico, Baqueanos (con integrantes de Bella Vista y de Luján). Bajo el escenario un gran cartelón decía: "No es lícito matar a un inocente".