Un arquitecto joven, Kerem, que trabaja como diseñador en Estambul, luego de algunos años de casado no logra tener un hijo. Para distraer a su esposa, muy conflictuada por la situación luego de algunos intentos fallidos, Kerem organiza un pequeño viaje. Un accidente, dos muertes y la prolongación hacia un pasado conflictivo desencadenan una situación complicada con la intervención de personajes ligados a la superstición y la magia (Serif Sezer, de "El baño turco").
El cine turco de desarrollo, con no más altibajos que algunas cinematografías de Europa Oriental, destaca por sus excelentes directores, como Nuri Bilge Ceylan ("Nubes de mayo"), Ferzan Ozpetek ("El baño turco", "Tengo algo que decirles") o Fatih Akin ("Buenos días Berlin", "En pedazos"), más relacionado con la producción alemana.
Más allá de estos directores, seguidos especialmente por cinéfilos, el verdadero desembarco del "gusto por lo turco" se ha dado por el increíble éxito de los teleteatros de ese origen en la televisión local. Desde la aparición de "Las mil y una noches", hace tres años, en nuestras pantallas, y los hasta veinte puntos de rating, que saludaron su llegada, series como "Esposa joven", "Qué culpa tiene Fatmagul?" y "Kara para Ask", explican de alguna manera la llegada de "Kerem, hasta la eternidad".
EL DOBLAJE
Engin Akyurek, el galán de esta película, también lo fue en los dos teleteatros mencionados. Eso permite explicar el porqué de la llegada de esta cinta ingenua, comercial y menor, que a incoherencias temáticas suma problemas de narración y elementalidades varias. A esto se agrega una versión doblada al español que hace evocar una prototelevisión de series extranjeras que pensábamos felizmente olvidada.
Calificación: Regular