Nueve futbolistas de Arsenal fueron detenidos luego de un enfrentamiento con la policía brasileña al término del partido que perdieron 5-2 con Atlético Mineiro en Belo Horizonte, y luego los liberaron tras el pago de una fianza de unos 15 mil dólares que fueron facilitados por un dirigente del club local.
Entre los futbolistas detenidos se encuentran Hugo Nervo, Damián Pérez e Iván Marcone, quienes junto al resto del plantel regresaron a Buenos Aires pasado el mediodía en un hermetismo absoluto.
"No podemos hablar de lo que pasó", dijo el delantero Darío Benedetto a los periodistas en el aeropuerto de Ezeiza, mientras sus compañeros también hacían silencio.
Tras el encuentro jugado el miércoles, correspondiente al Grupo 3 de la Copa Libertadores, los jugadores de Arsenal se enfrentaron con la policía, que les impidió acercarse al árbitro paraguayo Enrique Cáceres, a quienes querían reclamarle que la jugada del segundo gol del Mineiro no había sido penal.
Al ser atacados con palos por la policía brasileña, los futbolistas, se defendieron y, enardecidos, se sacaron sus camisetas en el círculo central para pelear, mientras que los efectivos los apuntaban con sus escopetas.
La gresca siguió en el túnel y terminó con nueve jugadores de Arsenal detenidos, según informó hoy el diario deportivo Lance de Brasil.
Los futbolistas recién fueron liberados tras el pago de una multa equivalente a unos quince mil dólares que fueron prestados por dirigentes del Atlético Mineiro.
Lance señaló que la dirigencia de Arsenal se comprometió a devolver ese importe en un plazo de diez días.
Nueve futbolistas de Arsenal fueron detenidos luego de un enfrentamiento con la policía brasileña al término del partido que perdieron 5-2 contra Atlético Mineiro en Belo Horizonte, y luego los liberaron tras el pago de una fianza de unos 15 mil dólares que fueron facilitados por un dirigente del club local.
Entre los futbolistas detenidos se encuentran Hugo Nervo, Damián Pérez e Iván Marcone, quienes junto al resto del plantel tenían previsto llegar esta tarde a Buenos Aires.
Tras el encuentro, correspondiente al Grupo 3 de la Copa Libertadores, los jugadores de Arsenal se enfrentaron con la policía, que les impidió acercarse al árbitro paraguayo Enrique Cáceres, a quienes querían reclamarle que la jugada del segundo gol del Mineiro no había sido penal.
Al ser atacados con palos por la policía brasileña, los futbolistas, se defendieron y, enardecidos, se sacaron sus camisetas en el círculo central para pelear, mientras que los efectivos los apuntaban con sus escopetas.
La gresca siguió en el túnel y terminó con nueve jugadores de Arsenal detenidos, según informó hoy el diario deportivo Lance de Brasil.
Los futbolistas recién fueron liberados tras el pago de una multa equivalente a unos 15 mil dólares que fueron prestados por dirigentes del Atlético Mineiro.
Lance señaló que la dirigencia de Arsenal se comprometió a devolver ese importe en un plazo de diez días.