Espectáculos
Murió Marisa Paredes, leyenda del cine
La gran actriz española falleció de forma repentina en Madrid, a los 78 años. El mundo la conoció a través del cine y, sobre todo, por su hermandad con Pedro Almodóvar, que la dirigió en filmes como ‘Tacones lejanos’ y ‘Todo sobre mi madre’. Se había iniciado en la televisión y el teatro le dio un baño de prestigio.
Marisa Paredes fue una actriz polivalente y comprometida, que trabajó en cine, teatro y televisión con grandes nombres de la pantalla y de la escena, una gran diva de la interpretación española y chica Almodóvar, que dedicó su vida al impulso y la defensa de los y las profesionales del cine.
Paredes falleció este martes a los 78 años, de manera repentina, en Madrid, según informó la Academia de Cine de España, de la que fue presidenta. Según su entorno cercano, la artista se encontraba en perfecto estado hasta al menos el domingo pasado, cuando acudió al Teatro Español madrileño a ver una representación de 'Luces de bohemia' en la que participaba su hija, la también actriz María Isasi (de su relación con el director Antonio Isasi-Isasmendi). Después de la función, estuvieron "tomando unos vinos y charlando", dijeron.
QUERIDO PEDRO
Si un nombre ilustre ha acompañado a Paredes durante su trayectoria, ese ha sido el de Pedro Almodóvar, su director en 'Entre tinieblas' (1983), 'Tacones lejanos' (1991) y 'La flor de mi secreto' (1995). Con él colaboró también en 'Todo sobre mi madre' (1999), 'Hable con ella' (2002) y 'La piel que habito' (2010).
Nacida el 3 de abril de 1946 en Madrid, a los quince años pisó un escenario por primera vez. De ahí, al teatro universitario, y de ahí a una carrera emblemática llena de reconocimiento y admiración. Porque Paredes obtuvo –entre otros galardones– el Premio Nacional de Cinematografía, la Medalla de Oro a las Bellas Artes y el Goya de Honor por "una prolífica y prolongada carrera, trayectoria que mantiene con absoluto vigor, apostando en numerosos trabajos por proyectos cinematográficos nacionales e internacionales definidos por el riesgo y el prestigio".
Además, trabajó junto a otros grandes directores como el mexicano Guillermo del Toro ('El espinazo del diablo', 2001), el italiano Roberto Benigni ('La vida es bella', 1997) y el francés Philippe Loiret ('Tombés du ciel' -’En tránsito-, 1993), y compartió reparto con glorias como Marcello Mastroianni ('Toris vies et une seule mort' -’Tres vidas y una sola muerte’-). En ‘La vida es bella’ encarnó a la madre de Dora, la protagonista de ese filme ganador de tres Oscar.
Los primeros pasos los dio la actriz en la televisión pública española (TVE), en concreto en el programa de realización de obras teatrales 'Estudio 1', gracias al que alcanzó un prestigio que le permitió saltar al cine y al teatro, convirtiéndose en referencia, pero sin dejar la pantalla chica.
En las tablas españolas fue una de las grandes. Protagonizó obras como la lorquiana 'Comedia sin título' (1990), 'Beckettiana' (1991), 'Hamlet' (2007) y una adaptación de ‘Sonata de otoño’, de Ingmar Bergman (2008).
ILUSTRE DEL CINE
Cineastas españoles como Fernando Trueba ('Opera prima', 1980), Jaime Chávarri ('Las bicicletas son para el verano', 1984), Agustí Villaronga ('Tras el cristal', 1986) y Jaime Rosales ('Petra', 2018) han contado con la profesionalidad de Paredes en sus películas.
Su carrera en el cine español le valió dos nominaciones a los premios Goya: Mejor actriz de reparto por 'Cara de acelga' (1987) y Mejor actriz protagonista por 'La flor de mi secreto' (1995).
Fue reconocida en España también con la Espiga de Honor de la Semana Internacional de Cine de Valladolid, con la Gran Medalla Vermeil de la Villa de París, así como con premios cinematográficos en certámenes como el de Karlovy Vary (República Checa), Taormina (Italia), Gijón o Málaga, en España.
En 2003, cuando estaba al frente de la Academia de Cine española, durante su discurso en la gala de entrega de los Premios Goya, Paredes afirmó: "No hay que tener miedo a la cultura ni al entretenimiento, ni a la libertad de expresión, ni mucho menos a la sátira, ni al humor. Hay que tener miedo a la ignorancia y el dogmatismo. Hay que tener miedo a la guerra". Palabras que reflejaron su compromiso en la defensa de su profesión y del sector, y su compromiso social, dado que su etapa como presidenta de la Academia coincidió con las movilizaciones ciudadanas por la guerra de Irak.
Más de setenta películas, ochenta ficciones televisivas y quince obras teatrales dan idea de la trayectoria de esta 'chica Almodóvar' que pronunció frases que han quedado en la historia del cine español como: "¿Existe alguna posibilidad, por pequeña que sea, de salvar lo nuestro?" ('La flor de mi secreto').