Política

Milei suspendió la reunión de gabinete y pone la mira en el Congreso para tratar de mantener en pie el DNU

El presidente Javier Milei suspendió la habitual reunión con sus ministros y secretarios que suele encabezar los martes y jueves, una jornada clave para el Gobierno debido a que desde las 11, la Cámara de Senadores debatirá el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023, a pesar de las voluntades del mandatario.

Según se informó, la decisión responde a incompatibilidades en la agenda de los funcionarios: "Agenda full. Ya el martes fuimos pocos", respondió un funcionario que participa de los encuentros.

Asimismo, tras la puja del Poder Ejecutivo para evitar dar tratamiento al DNU en la sesión convocada por la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, aseguran que "no hay crisis en el Gabinete".

Si bien por estas horas la actualidad está atravesada por la ola de violencia narco que asola a Rosario y por las consecuencias del temporal que viene golpeando al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en el Gobierno la mira está puesta en el Senado, donde la posibilidad de que el DNU de Milei pende de un hilo. Para el Presidente, ese decreto es clave para instrumentar políticas que considera claves para su gestión.

Por eso, Milei puso en manos del ministro del Interior, Guillermo Francos, negociaciones de última hora con los gobernadores para asegurarse el respaldo de la Cámara Alta para el decreto. 

Lo cierto es que esta mañana a las 8.34, el Presidente cruzó el salón de los Bustos de Casa Rosada y se recluyó en su despacho. Portando su habitual campera de cuero y un pantalón cargo negro, el mandatario desayunó junto al vocero presidencial, Manuel Adorni, y se esperaba que siga la sesión que parece encaminarse hacia una gran derrota.

Tras la convocatoria de Villarruel, la Oficina del Presidente emitió un comunicado en el que alertó que el Gobierno espera que "el Poder Legislativo no se deje cautivar por el canto de sirena de quienes pretenden ´anotarse´ victorias de corto plazo en detrimento del futuro de los 45 millones de argentinos".

La decisión de la vicepresidenta generó fuerte repudio en redes sociales por parte de la militancia mileísta y hasta el propio mandatario lanzó algunos dardos -negativos- al respecto.

Por los pasillos de Casa Rosada admiten que no responde a la voluntad de Milei dar tratamiento al DNU "básicamente porque no están los números y lo van a rechazar", pero entienden que "dentro del Congreso las cosas no son tan lineales".

 Lo cierto es que la relación entre el Presidente y Villarruel no transita sus mejores épocas, pero esto no imposibilita que mantengan el diálogo fluido, aunque formal. Con el pasar de las semanas, Villarruel dejó de asistir con la frecuencia con la que lo hacía a las reuniones de Gabinete que se celebran en el salón Eva Perón y su participación se volvió cada vez más esporádica.

Su último presente data del jueves 7 de marzo, jornada en la que Milei debió ausentarse y el intercambio lo encabezó el jefe de Gabinete, Nicolás Posse.

El diputado José Luis Espert se hizo eco de la interna y manifestó sus dudas respecto a las voluntades de la titular del Senado. Ante la pregunta que le hicieron en una entrevista para LN+ sobre si creía que Villarruel "está intentado desestabilizar al Gobierno", Espert respondió: "A la luz de lo que pasa, me genera dudas porque, si se cayera el DNU 70/23, sería un golpe fuerte".

"La vicepresidenta contaba con otras alternativas. No sé por qué lo hizo. Habría que preguntarle a ella que piensa", completó.