Menotti agarró un fierro caliente llamado Central

El legendario César Luis Menotti acordó anoche con los directivos de Rosario Central su incorporación al club del barrio Arroyito en el que vio la luz como futbolista, y en el que dirigirá gratis al primer equipo hasta junio del corriente año. "Menotti nos anunció que dirigirá gratuitamente hasta la finalización del presente Clausura y después, a partir de junio, se pondrá en marcha el proyecto que tenía previsto, por el que se constituirá una sociedad deportiva con el Barcelona", indicó el secretario de la entidad rosarina, Néstor Mascó. El presidente Juan Carlos Campagna, el tesorero Jorge Sauán y el mencionado Mascó se reunieron ayer con el Flaco en Buenos Aires y resolvieron rápidamente adelantar el proyecto previsto para junio. "Menotti estará mañana (por hoy) en Rosario para terminar de resolver los últimos detalles de su incorporación y después se pondrá a trabajar inmediatamente. En esta tarea lo acompañarán Rogelio Poncini como ayudante de campo y Fernando Signorini como preparador físico", amplió el secretario centralista. "Si tengo que poner la cabeza por Central la pongo", había dicho en diciembre pasado al matutino rosarino El Ciudadano, y por los últimos acontecimientos que finalmente desembocaron en su acceso al club de que es hincha, esta decisión se parece mucho a eso, ya que más allá de su relación con el Barcelona, la interna en Central está imposible. Es que para llegar a Menotti, los dirigentes canallas atravesaron primero por una farragosa gestión con el ex entrenador del club, Miguel Angel Russo, que declinó el ofrecimiento forzado por las amenazas recibidas por quien iba a ser su colaborador, José Aurelio Pascuttini. "En este marco es imposible que vaya a Central", se excusó ayer el técnico, después de interiorizarse de las amenazas que condujeron barrabravas del club que querían imponer en el cargo a Pedro Marchetta para relevar al renunciante Daniel Teglia. Justamente Teglia, en otra incongruencia más, dirigió el entrenamiento de ayer a pedido de la dirigencia, en parte obligado por su condición de coordinador de las divisiones inferiores, puesto que aún mantiene. "Lo que pasó en estos días no puede considerarse como un avasallamiento a la autoridad de los dirigentes, sino todo lo contrario. Nosotros nos mantuvimos firmes ante el embate de unos barras que querían imponer a Marchetta", fue la versión de los hechos que dio Mascó. "Nosotros fuimos un muro de contención en esta situación, los denominados pillines querían imponer a Marchetta y los chaperitos a Omar Palma, a quien nunca se marginó de una posible lista de candidatos. Corría con las mismas chances que Trossero o Ferraro". ¿SERA UNA FILIAL? El Proyecto Barcelona consistiría en un intercambio entre la entidad catalana y la rosarina por la que además de recibir jugadores desde Argentina, los españoles también cederían a algunos que no tienen lugar en su equipo. El Flaco es asesor de la entidad catalana desde el año pasado y desde hace varios meses los máximos dirigentes del Barsa le habían encargado que "encontrara un club en Argentina" para encarar este emprendimiento que en España consideran como una filial y Mascó calificó de sociedad deportiva.