Opinión
CON PERDON DE LA PALABRA

Los gauchos de Boedo

Soy hincha de San Lorenzo de Almagro. Alguno de cuyos equipos exitosos fueron conocidos como Los Gauchos de Boedo.  Empecé a hinchar por San Lorenzo cuando comencé a interesarme por el fútbol profesional, en 1946. Año en el cual San Lorenzo salió campeón y el equipo formaba así:

Blazina

Vanzini y Basso

Zubieta, Greco y Colombo

Inbelloni, Farro, Pontoni, Martino y Silva

Como advertirá el lector, la formación del equipo era la clásica: 1/2/3/5. Nada de 1/4/2/4. Ni 1/4/3/3.

¿Por qué me hice hincha de San Lorenzo? En primer lugar por una razón extrafutbolística: porque me gustaron los colores de la camiseta. En segundo término porque en aquel lejano 1946 San Lorenzo mató. Aunque al equipo no lo llamaran entonces Los Matadores, cosa que ocurrió después. Además, porque el club había sido fundado por un sacerdote, el salesiano Lorenzo Massa que le dió el nombre de su santo patrono. 

Después de ganar el campeonato en la Argentina, San Lorenzo hizo una gira por Europa con resultados deslumbradores. Terminó invicto y al seleccionado portugués le hizo seis goles. 

La cancha de San Lorenzo quedaba en Boedo, próxima a un gran depósito de gas, razón por la cual se llamaba El Gasómetro y tenía gradas de madera dura que más tarde serían vendidas a un club de Mar del Plata. Después tuvo que emigrar al Bajo Flores, barrio peligroso donde los concurrentes a la cancha debían asumir el riesgo de ser asaltados.

Vuelve ahora San Lorenzo a Boedo, donde ignoro si sigue existiendo el famoso gasómetro. 

Allá por los años 40 ó 50, tal vez 60, había una audición de radio que se llamaba Gran Pensión El Campeonato. Ambientada en una pensión porteña, sus huéspedes representaban a distintos clubs de fútbol. El personaje que encarnaba a San Lorenzo se llamaba Don Lorenzo El Amargo. Lo de amargo  no constituía una imputación sino que respondía a que rimaba vagamente con almagro.   

Jugadores destacados de aquel equipo del 46 fueron el impertérrito Mierko Blazina, que era yugoslavo. Oscar Basso, un elegante zaguero central. Ángel Zubieta, emigrado vasco.  Y René Pontoni, habilidoso rosarino que, con Farro y Martino, formaba una temible tripleta ofensiva.

Más tarde se destacarían El Manco Casá, que había perdido un brazo cuando le disparó el centinela de un cuartel por no haber oído el alto consiguiente. La Oveja Telch y José Rafael Albrecht, infalible pateando penales. Ángel Perucca, que vino de Rosario. El Bambino Veira. El Lobo Fisher, José Francisco Sanfilippo. Y, ya en la actualidad, Néstor Ortigoza y el arquero Sebastián Alberto Torrico.

Algunos de los hinchas conocidos de San Lorenzo son el actor de cine Viggo Mortensen y los ex embajadores de los Estados Unidos en la Argentina James Cheek y Terence Todman. 

San Lorenzo es uno de los grandes del fútbol argentino.