Los más de cuatro millones de hinchas que coparon las calles de Buenos Aires fueron saludados hoy desde helicópteros por los jugadores de la selección argentina de fútbol que ganó el Mundial de Qatar, después de que a los futbolistas se les hiciera imposible avanzar por tierra hacia la zona del centro porteño donde los esperaba una enorme demostración de agradecimiento.
Los jugadores tuvieron que bajar de los micros para abordar helicópteros en la Escuela de Cadetes de la Policía Federal en el barrio porteño de Villa Lugano, después de un recorrido de más de cuatro horas desde la salida del predio que la AFA posee en Ezeiza.
El sobrevuelo en helicópteros de la selección campeona del mundo por zonas de la ciudad de Buenos Aires duró poco más de 20 minutos, tras la interrupción de la caravana por tierra que se inició en el predio de la AFA en Ezeiza minutos antes del mediodía y que debió finalizar antes de completar su recorrido por la gran cantidad de gente que se hallaba sobre la autopista.
Encabezados por Lionel Messi, Rodrigo De Paul y Enzo Fernández, los campeones del mundo fueron trasladados en el micro descapotable de la empresa Plusmar hasta la escuela de cadetes Pirker de la Policía Federal Argentina, en Villa Lugano, donde abordaron helicópteros policiales y de la Prefectura Naval.
Desde allí despegaron y recorrieron el trayecto que tenían previsto realizar en el micro, para que pudieran recibir el afecto de alrededor de cuatro millones de personas que se hallaban esperando en la zona de la Autopista 25 de Mayo y la avenida 9 de Julio.
El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, valoró que "con helicópteros de la Policía Federal y de Prefectura, los campeones del mundo sobrevolaron los espacios colmados de hinchas" y dieron "una enorme vuelta olímpica".
"Con helicópteros de la Policía Federal y de Prefectura, los campeones del mundo sobrevolaron los espacios colmados de hinchas. Con varios millones de personas compartiendo, dieron una enorme vuelta olímpica… Felicitaciones Chicos", tuiteó el funcionario nacional.
Por último, Fernández escribió: "Son leyenda y orgullo de todos los argentinos".
Poco antes de las 16.30, los campeones del mundo aterrizaron en el predio de la AFA poniéndole punto final a una jornada marcada por la emoción en las calles. Los helicópteros con Lionel Messi, Rodrigo De Paul y el resto de los futbolistas que ganaron el Mundial de Qatar regresaron junto a la Copa del Mundo.
Ante el hormiguero de gente que evitaba el avance de los micros, sumado a un accidente en el que un hincha cayó cerca del micro desde un puente en la Autopista Riccheri, los futbolistas optaron por abordar los helicópteros.
El micro con la 'Scaloneta' recorrió 12 kilómetros entre el predio de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), de donde partió poco antes de mediodía, y Riccheri y General Paz en tres horas y media, a paso de hombre en medo de una infinidad de personas, en una imponente demostración de agradecimiento.
Minutos antes, el presidente de la AFA, Claudio Tapia, avisó que era imposible seguir el recorrido por tierra.
"No nos dejan llegar a saludar va toda la gente que estaba en el Obelisco, los mismo organismos de seguridad que nos escoltaban no nos permiten avanzar. Mil disculpas en nombre de todos los jugadores campeones. Una pena", escribió..
Fue entonces que la selección hizo vuelos por sobre distintos puntos de la ciudad y se acercó a la zona del Obelisco y otras zonas céntricas, donde estaba agolpada la mayoría del público, antes de enfilar nuevamente hacia el predio de la AFA.
"El helicóptero guía de la Policía Federal Argentina H16 lleva a bordo al Capitán Lionel Messi, Lionel Scaloni y Rodrigo De Paul, quienes llevan la Copa del Mundo. Los mismos harán un sobrevuelo por el Obelisco, zona de Constitución, 9 de Julio, Av. De Mayo, Autopista 25 de Mayo para saludar al pueblo, donde finalmente regresarán al predio de la AFA", informó la fuerza de seguridad.
Por su parte, la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, dijo en Twitter: "Los campeones del mundo están sobrevolando todo el recorrido en helicópteros porque se hizo imposible seguir por tierra ante la explosión de alegría popular".
"Sigamos celebrando en paz y mostrándoles nuestro amor y admiración", cerró.
Los hinchas, muchos en éxtasis, saludaban hacia el cielo, cantaban y saltaban emocionados con la esperanza de ser vistos o escuchados desde las alturas por Lionel Messi y el resto de los jugadores.
Unos cuatro millones de personas configuraron hoy una gigantesca marea albiceleste y salieron a las calles para saludar a la selección argentina campeona del mundo, en una imponente demostración de agradecimiento que será recodada por décadas en el país.
La Policía de la Ciudad de Buenos Aires informó a Télam que son al menos cuatro millones las personas que se movilizaron este martes en distintos puntos como el Obelisco porteño, la avenida 9 de Julio, la autopista 25 de Mayo y Riccheri, la Plaza de Mayo y la zona de Ezeiza, desde salieron los jugadores en esta caravana post mundialista.
Miles de hinchas con camisetas de la selección nacional y banderas celestes y blancas se concentraron desde la mañana en el Obelisco, en pleno centro porteño, y en las puertas del predio de la AFA, en el partido bonaerense de Ezeiza, para acompañar la caravana de festejos que el equipo Campeón del Mundo realizará por gran parte de la ciudad de Buenos Aires.
La Selección campeona del mundo en Qatar 2022 llegó al país a las 2.24 en un vuelo de Aerolíneas Argentinas y fue recibida por una multitud que acompañó el paso del micro que la trasladó desde el aeropuerto hasta el predio de la AFA.
Los integrantes del equipo liderado por Lionel Messi y dirigidos por Lionel Scaloni partieron desde Ezeiza al mediodía en una caravana de festejo que inicialmente pasaría por el Obelisco, entre otros puntos de CABA, en medio de una jornada histórica y feriado nacional decretado por el gobierno nacional.
Aunque inicialmente se esperaba que el micro con los jugadores llegara a saludar al Obelisco, ante la multitudinaria concentración de personas, a través de un tuit desde la cuenta oficial del seleccionado campeón informó que se modificaba el recorrido.
"Los futbolistas se acercarán a saludar a los hinchas desde la Autopista 25 de mayo y 9 de Julio, de acuerdo al circuito dispuesto por los organismos de seguridad (Nación, Provincia y Ciudad de Buenos Aires)", indicaron en la red social.
Desde entonces, una marea humana se desplazó desde el Obelisco a la autopista 25 de Mayo en su intersección con la Avenida 9 de Julio, donde bajo un sol abrasador comenzaron a caminar y entonar los cánticos de aliento a la Selección, con la ya mítica "Muchachos…" que se repetía sin cesar.
Pero todos esos recorridos previstos tuvieron que ser modificados y luego interrumpidos ante la enorme multitud.
UNA MULTITUD EN LAS CALLES
Unos cuatro millones de personas configuraron hoy una gigantesca marea albiceleste y salieron a las calles para saludar a la selección argentina campeona del mundo, en una imponente demostración de agradecimiento que será recodada por décadas en el país.
"Dale campeón, dale campeón", gritó la multitud poco antes de las 15.30 cuando el micro con los jugadores de la Selección campeona del mundo pasó por Riccheri y General Paz, en el partido bonaerense de La Matanza, después de ocho horas de espera, en las que la gente soportó un calor abrasador que calmó con agua, sombrillas y las camisetas albicelestes en la cabeza.
"Nonno, nonno, cumplí un sueño, me miró Lautaro Martínez", le dijo un Benjamín, de 9 años, a su abuelo Raimundo Tarantino que lo llevaba a caballito, en medio de un eufórico festejo con personas rompiendo en llanto frente al micro de la Selección, que se abría paso entre la multitud que colmaba la vía que enlaza el aeropuerto de Ezeiza con la General Paz, para llegar a la ciudad de Buenos Aires.
Tarantino, un italiano de 91 años que hace siete décadas vive en la Argentina, llegó de Villa Celina con su nieto para ver a los campeones y en diálogo con Télam elogió el trabajo del DT Lionel Scaloni por "haber armado al equipo", mientras su nieto guardaba para siempre la imagen de Lautaro mostrando la copa del mundo, mientras Emiliano 'Dibu' Martínez hacía flamear la bandera en alto.
"Era el sueño de mi vida. Estoy emocionada. Mi hija de 18 años está llorando", dijo Mirta Rodríguez, de 67 años, que tenía en brazos a su nieto de siete meses.
"Que sigan así, Angelito (por Ángel Di María) es mi ídolo, lo amo", contó la vecina de Villa Celina.
Gregorio Quinteros, de 52 años, estaba junto a su hija Valentina, de 6, desde las 10 de la mañana cuando ya había unas 2.000 personas, entre familias y grupos de amigos en el lugar.
"Estoy bien porque los vi en la vida real. Estoy feliz. Me siento como nunca, una emoción terrible; esto es una locura", aseguró a Télam Quinteros, también de Villa Celina.
Desde temprano, bebés, jóvenes y hasta adultos mayores armaron una hinchada en el límite entre La Matanza y el barrio porteño de Lugano para esperar la caravana de campeones en uno de los puntos de su recorrido.
Algunos incluso llegaron a las 2 de la mañana y cortaron parcialmente la autopista Riccheri, por donde a lo largo de la jornada fueron pasando micros con hinchas que tocaban bocina, mientras las personas los saludaban con cantos, cumbia, espuma y aplausos.
"Como no sabemos si van a cambiar el recorrido, nos quedamos en la intersección de General Paz y Autopista 25 de Mayo y nos corremos para un lado o para el otro, así los podemos ver un ratito aunque sea porque en el Obelisco va a haber mucha gente", dijo temprano Adolfo Contreras de Ciudad Oculta que llegó hasta allí con dos de sus hijos y un nieto.
"Espero que paren un cachito, que los jugadores pasen despacio y saluden, que compartan con la gente que todo el pueblo está en la calle", remató este hincha de Independiente cuyo máximo ídolo es "Dibu" Martínez.
Debajo de la sombra y rodeando una camioneta que lleva un colchón en el techo un grupo de seis amigos de Villa Lugano, Mataderos y Caballito fueron los primeros en llegar.
"Yo prometí que si Argentina salía campeón me cortaba el prepucio", sorprendió Agustín Bahton, de 19 años, que vive en Lugano mientras quienes lo acompañan se reían y aplaudían.
"Fue un momento de locura. Siempre jodemos con que en mi familia soy el único no judío, entonces bueno, prometí eso", remató.
A su turno, Santiago Mancuello, un joven del barrio de Caballito, explicó que "yo con que me mire alguno estoy hecho" sobre su expectativa de cruzar la vista con alguno de los campeones.
Carlos Morales, de 60 años y oriundo de Tres de Febrero, es veterano de Malvinas y siente que está viviendo "un sueño".
"En el 86 lo pasé muy bien porque le ganamos a los ingleses, fue un partido muy especial para mí. Hoy vine con mi hija y mi hijo, es la primera vez que ellos nos ven campeones", dijo a la agencia Télam.
Miles de hinchas con camisetas de la selección nacional y banderas celestes y blancas se concentraban esta mañana en el Obelisco, en pleno centro porteño, y en las puertas del predio de la AFA, en el partido bonaerense de Ezeiza, para acompañar la caravana de festejos que el equipo campeón del mundo realizará por gran parte de la ciudad de Buenos Aires.
La Selección campeona del mundo en Qatar 2022 llegó al país a las 2.24 en un vuelo de Aerolíneas Argentinas y fue recibida por una multitud que acompañó el paso del micro que la trasladó desde el aeropuerto hasta el predio de la AFA.
Los integrantes del equipo liderado por Lionel Messi y dirigidos por Lionel Scaloni partieron desde Ezeiza al mediodía en una caravana de festejo que inicialmente pasaría por el Obelisco, entre otros puntos de CABA, en medio de una jornada histórica y feriado nacional decretado por el gobierno nacional.
Aunque inicialmente se esperaba que el micro con los jugadores llegara a saludar al Obelisco, ante la multitudinaria concentración de personas, a través de un tuit desde la cuenta oficial del seleccionado campeón informó que se modificaba el recorrido.
"Los futbolistas se acercarán a saludar a los hinchas desde la Autopista 25 de mayo y 9 de Julio, de acuerdo al circuito dispuesto por los organismos de seguridad (Nación, Provincia y Ciudad de Buenos Aires)", indicaron en la red social.
Desde entonces, una marea humana se desplazó desde el Obelisco a la autopista 25 de Mayo en su intersección con la Avenida 9 de Julio, donde bajo un sol abrasador comenzaron a caminar y entonar los cánticos de aliento a la Selección, con la ya mítica "Muchachos…" que se repetía sin cesar.
Frente a la Casa Rosada, de todos modos, se instalaron cuatro pantallas para que la gente pueda seguir la fiesta de los campeones en directo.
En Plaza de Mayo se montaron dos pantallas enormes con la bandera nacional y el Cabildo luce, también, una bandera celeste y blanca con la leyenda ¡Gracias!
En esta zona porteña, el sonido era de bombos y murgas en una fiesta popular de la que nadie quiere bajarse.