La Confederación General del Trabajo (CGT) anunció hoy un paro nacional de 24 horas para el 6 de abril, el primero en contra del gobierno de Mauricio Macri, como "demostración de que hay un malestar generalizado en amplias capas de la población".
Así lo anunciaron esta tarde Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña, en una conferencia en la que plantearon los mismos reclamos que motivaron la movilización del pasado 7 de marzo: que el Gobierno rectifique su política económica y reconozca la pérdida del poder adquisitivo del salario durante el año pasado; el cese de despidos, y como repudio a la caída del consumo y a la apertura de las importaciones.
Tras una hora de reunión y en un breve anuncio que duró un poco más de 10 minutos, el triunvirato de la CGT comunicó que la decisión fue tomada "por unanimidad" y que no incluirá movilización, y si bien aclararon que "no vamos a invitar" a ningún otra central sindical, plantearon "que se sumen los que se quieran sumar".
"Ojalá que esto sirva para que el gobierno recapacite y de verdad escuche a los sectores más necesitados, que son los que ya pusieron el hombro 15 meses, y el sector empresario no lo puso ni un solo día", cuestionó Acuña.
El secretario general del gremio de trabajadores de estaciones de servicio y estacionamientos también pidió que "reconozcan la pérdida del poder adquisitivo de los salarios" y expresó en nombre de la central "el apoyo solidario a todos los gremios docentes que hoy están en la lucha por la dignidad de su salario".
En ese marco, Schmid definió el paro nacional como "una expresión del malestar social" que, según su criterio, existe en varios sectores de la sociedad.
Asimismo, Daer criticó al Gobierno al asegurar que "no tomó nota" de los advertencias sobre las medidas económicas y se quejó de la reciente reunión entre funcionarios y gremios industriales en la que "no se les ofreció resolver ningún tema de fondo".
"Queremos que de alguna manera el plan económico nos incluya a todos", aseveró.
Después de la movilización del 7 de marzo en la que varios dirigentes sindicales debieron retirarse de la Plaza de Mayo abucheados por manifestantes al no haber anunciado ese día la fecha del paro, los directivos aprovecharon la conferencia para ratificar tanto el plan de lucha que llevaron a cabo hasta ahora como la legitimidad de su mandato al frente de la CGT.
"Cuando decimos por unanimidad, lo decimos en el sentido amplio de la palabra. Todos los sectores no solamente han ratificado el apoyo a la conducción, sino que han estado en un todo de acuerdo para llevar adelante la implementación de esta medida de fuerza", dijo Schmid por un lado, mientras que Daer destacó "la coherencia en cada una de sus actitudes" frente al gobierno nacional.
Acuña, por su parte, recordó que "esta CGT tuvo la responsabilidad de ir marcando todos estos errores que se iban cometiendo y también teniendo la prudencia necesaria al tratar de ir conteniendo la paz social, más allá de los incumplimientos" de lo acordado en la mesa de diálogo establecida por el Poder Ejecutivo y de la que también participó el sector empresarial.
Consultados por las versiones de que el presidente Mauricio Macri se habría comunicado con algún miembro de la conducción de la CGT para frenar el paro, Daer negó que haya habido algún contacto entre las partes.
Y al respecto de las acusaciones que hace el oficialismo de que el kirchnerismo busca alentar un paro para desestabilizar a Macri, los dirigentes sostuvieron que "ninguno de acá es kirchnerista" y argumentaron que "tanto el gobierno como otros sectores buscan en el otro el culpable para no hablar de la dimensión de la crisis".