Mar del Plata - El desperfecto que dejó sin agua a la mitad de Mar del Plata el viernes, en pleno fin de semana largo y que todavía afecta a unas 30 mil personas, persistirá "hasta el martes", por lo que la ciudad definirá en la "la tarde" de mañana si se dictan clases en las zonas afectadas.
Así lo admitió el intendente de General Pueyrredón, Gustavo Pulti, quien afirmó que el plazo para recuperar el normal suministro de agua "sigue siendo 96 horas", a contar desde la madrugada del viernes, cuando comenzó el desperfecto en una estación de bombeo de la Plaza Mitre, ubicada en el centro de la ciudad.
El plazo para concluir los trabajos "sigue siendo de 96 horas", dijo Pulti, quien afirmó que el hecho "se trató de un accidente", aunque "se van hacer todas las investigaciones".
Según el intendente, el corte "afecta al 10 por ciento de la ciudad", lo que representa a unos 30 mil usuarios, que soy abastecidos de agua potable por camiones cisterna ubicados en 17 puntos de la ciudad.
En ese contexto, las autoridades comunales anunciaron que en la tarde de mañana se definirá si se dictan clases en los establecimientos de los barrios afectados, aunque aclararon que se trabaja para evitar la suspensión de las actividades escolares. "Estamos trabajando a fondo para que el lunes haya clases", resaltó Pulti.
En ese contexto, durante la jornada de hoy se sumaron nuevos puestos de distribución de agua potable para que los vecinos que no cuentan con las reservas de sus tanques puedan acudir y proveerse.
El presidente de Obras Sanitarias de Mar del Plata, Mario Dell Olio, informó que, a los 15 puntos de distribución de agua, se sumaron otros dos, en el lavadero de autos de Juan B. Justo al 2800 y en Rawson y Aristóbulo del Valle, con lo cual suman 17 lugares donde hay camiones cisternas con provisión de agua.
En otro orden, continúa la entrega de agua potable entre los habitantes de la ciudad y ya fueron dados más de dos mil litros en centros de salud, geriátricos, a personas con discapacidad y a restaurantes "que presentaban una situación crítica para que pudieran dar respuesta a sus clientes".
Sin embargo, en pleno fin de semana largo por el feriado del Día Internacional del Trabajo, algunas confiterías y restaurantes debieron cerrar sus puertas por no contar con el servicio.
Igualmente, se espera la llegada de otros diez mil litros para garantizar el suministro mientras dure la emergencia.
Será a través de botellas de dos litros, con lo cual el aprovisionamiento de agua potable está garantizado, aseguró Dell Olio.
Por otra parte, el funcionario confirmó que la comuna debió infraccionar a cuatro lavaderos de autos que estaban prestando servicio, en contradicción con lo dispuesto por la ciudad a través de una ordenanza, que prohibió esa actividad mientras dure la emergencia.
Esta mañana, varios llamados a distintas radios de la ciudad sirvieron para que los habitantes y turistas de "La Feliz" muestren su descontento porque muchos lavaderos de autos ubicados en puntos de la ciudad que no estuvieron afectados, funcionaron con normalidad.