La adopción de la inteligencia artificial representa una verdadera revolución en los procesos empresariales, pero muchos tomadores de decisiones todavía están lejos de otorgarle la importancia que requiere. Esta es la principal advertencia del último informe de Deloitte, titulado “Governance of AI: A Critical Imperative for Today’s Boards”. De acuerdo a este trabajo, casi el 50% de los directores y ejecutivos encuestados no tienen a la IA en su agenda inmediata, una tecnología que no solo incrementa la productividad, sino que también permite enfrentar con éxito muchos de los desafíos estratégicos del presente. Veamos ahora las ideas principales de este trabajo.
La falta de acción frente a la IA no siempre se trata de una resistencia al cambio, sino más bien a una falta de comprensión. El informe señala que el 79% de los miembros de juntas tienen un conocimiento limitado o nulo sobre IA, lo que les impide incluirla en sus agendas de forma inteligente. Para remediarlo, Deloitte sugiere que las directivas deben organizar sesiones informativas sobre IA y organizar retiros estratégicos con este tema como eje.
En términos numéricos, el 66% de las organizaciones que priorizan la IA buscan mejorar la productividad, lo que demuestra que su inclusión es esencial debido al impacto directo que ofrece en los objetivos de cualquier organización.
Definir responsabilidades dentro de la dirección de una empresa es esencial para lograr una gobernanza efectiva de la IA. Deloitte indica que el 45% de estas direcciones no tienen estructuras claras que definan quién supervisa las iniciativas de IA, lo que genera un cuello de botella en la implementación. Asignar tareas específicas y garantizar un flujo constante de información entre la dirección y los empleados encargados de su ejecución son dos elementos clave para el éxito. No obstante, solo el 15% de las organizaciones han sumado a especialistas en IA en sus direcciones, lo que muestra una necesidad urgente de diversificar las habilidades presentes en la toma de decisiones estratégicas.
Uno de los principales obstáculos para la adopción de la IA es la propia percepción de falta de preparación: solo el 3% de los ejecutivos considera que sus empresas están efectivamente preparadas para integrar la IA en sus procesos, mientras que el 41% admite no estarlo en absoluto. Este sentimiento de inadecuación está relacionado con la ausencia de estrategias definidas y un bajo compromiso con la adopción en general. Además, la baja frecuencia con la que se discute la IA en estas direcciones de empresas (el 45% no la abordó nunca) refleja la necesidad de incluir este tema como un punto permanente en las agendas.
Los beneficios de la IA ya dejaron de ser un mito y pasaron a ser claros y cuantificables: más del 50% de las organizaciones la utilizan para mejorar la experiencia del cliente, mientras que el 37% la emplea para optimizar costos. Otros usos destacados incluyen la innovación en el desarrollo de productos (46%) y la expansión hacia nuevos mercados (15%). La IA no solo permite aumentar la eficiencia operativa al automatizar procesos repetitivos, sino que también facilita el análisis de grandes volúmenes de datos, lo que termina por decantar en decisiones más informadas. Estas capacidades son clave para mantener la competencia en un mercado en constante evolución.
Por último, integrar la IA en las estrategias empresariales permite revolucionar la forma en que las organizaciones operan y se adaptan a los cambios. El informe de Deloitte confirma que, para el 66% de las empresas encuestadas, la IA representa un eje estratégico para mejorar la eficiencia operativa, mientras que la mitad la identifica como una herramienta esencial para mejorar las relaciones con los clientes. Además, su uso en la gestión del riesgo y el cumplimiento normativo garantiza que las empresas puedan operar dentro de los marcos regulatorios mientras desarrollan su potencial innovador.
En definitiva, la buena gobernanza de la IA ya dejó de ser un lujo. Se trata de una verdadera necesidad para cualquier junta directiva de hoy: la adopción de una estrategia que combine educación, estructura y compromiso estratégico es fundamental para aprovechar todo el potencial de esta tecnología.
(*) General Manager para el Grupo Dinatech.