La CGT puso de manifiesto su rechazo al Fondo Monetario Internacional (FMI) ante la llegada a la Argentina este viernes de la titular del organismo internacional, Christine Lagarde.
El sindicalista Juan Carlos Schmid dejó en claro que la central obrera tiene una visión crítica de la institución y cuestionó al Gobierno por pedirle un crédito preventivo para solventar la turbulencia económica que enfrenta el país: "Nunca la intervención del FMI dio buenos resultados".
El sindicalista le advirtió a Lagarde que "si viene a buscar el consenso social que pidió, tiene que saber que no contará con el aval de la CGT".
Y alertó que tendrá un "costo gigantesco" para el país llegar a las metas planteadas por el organismo internacional. "Hay un ajuste de 300 mil millones de pesos en juego, el equivalente a más de 34 millones de haberes jubilatorios o el presupuesto de los próximos 5 años de las fuerzas armadas", afirmó.
Schmid aseguró que el recorte presupuestario que implicará implementar el plan para bajar el déficit "abrirá un frente de conflicto infinito" y reclamó que "es inviable llevar adelante un ajuste de estas características en un país que ya está paralizado y en recesión".
Por otro lado, salió al cruce del presidente Mauricio Macri después de que el presidente admitió que vendrán meses difíciles para la actividad pero dijo que la inflación bajará diez puntos en 2019.
"El Gobierno tiene que comprender con razonamiento, sensibilidad y verdad que su palabra está más devaluada que el peso argentino. Es importante que no solamente corrija el rumbo, sino que convoque a una reunión que ponga en orden estas consecuencias; algo que no brindará la presencia del FMI", lanzó.
Juan Carlos Schmid consideró que "parecería que los únicos instrumentos que tiene Cambiemos para encaminar la economía son el ajuste con recesión, el endeudamiento y la devaluación. "Que el organismo multilateral de crédito tenga muy presente que la CGT no aceptará este ajuste que recae sobre los sectores más débiles", concluyó.