Las páginas web de varios medios de comunicación suelen mostrarnos cotidianamente una cantidad significativa de hechos relacionados con la farándula.
Temas que antes eran solo de los programas y revistas de chimentos, hoy abundan en los portales de noticias. Los personajes de Gran Hermano y sus andanzas ocupan gran parte del espacio de las novedades del día.
Otro tema que fue ganando terreno son las imágenes de asaltos, accidentes y asesinatos que fueron captados por las cámaras de seguridad o por algún teléfono celular.
En las últimas semanas se publicó el video del asesinato a sangre fría del playero de una estación de servicio en la Ciudad de Rosario y más recientemente el asesinato de un peluquero en un local del barrio de Recoleta de nuestra ciudad, por nombrar los que tuvieron mayor difusión.
Tampoco se quedaron atrás los noticieros de televisión que reiteraron morbosamente una y otra vez las imágenes, sin considerar el horario de protección al menor, ni el decoro, ni el respeto a los familiares y amigos de las víctimas.
Consultando con algunos medios, confirmamos lo que sospechábamos, las imágenes que contienen muertes y la vida y miserias de los famosos son las que lideran las búsquedas de los visitantes de dichas páginas.
Esta actitud de las audiencias obviamente está generando que este tipo de notas se sigan multiplicando para seguir manteniendo o aumentando las visitas, cayéndose en un círculo vicioso.
Con la caída registrada, sobre todo a partir de 2020, del consumo de los medios en soporte papel, las empresas propietarias de diarios y revistas siguen profundizando la diversificación de su negocios, en donde el medio originario pasó a ser uno más.
COMPLICIDAD
Es probable que si preguntamos sobre esas imágenes, más de uno, no solo las vio sino que las buscó o las envió a otros, pero también es probable que esas mismas personas se quejen del contenido truculento o pasatista de los medios masivos. ¿Qué es lo que hace que esto sea un objeto de venta y consumo corriente?
Quizás haya una implícita y macabra complicidad entre medios y espectadores y una variada gama de factores, psicológicos, sociales y culturales. Se vende porque se compra. Se compra porque se vende.
Si bien, estas preferencias no son universales y varían de una persona a otra, también es cierto que desde tiempos muy antiguos, los seres humanos han sentido curiosidad por lo desconocido, lo extraño y lo inusual.
Lo siniestro despierta la curiosidad innata. Sigmund Freud lo revestía de una vivencia especial donde lo extraño se presenta familiar y lo familiar se vuelve extraño. ¿Cómo es posible que lo familiar se transforme en enigmático y bajo qué condiciones ocurre?
ADRENALINA
Lo pasatista (entiéndase que en este caso no nos referimos a aquello que simplemente lleva a vivir un rato de sano ocio, sino a superficialidades o intromisiones en la vida íntima de los demás) puede servir como una forma de escapar de la realidad y experimentar emociones diferentes a las que se enfrentan en la vida cotidiana. La rutina es una mala consejera.
El contenido morboso frecuentemente despierta emociones fuertes: miedo, fascinación o asco. Para algunas personas, las respuestas emocionales intensas, pueden resultar atractivas.
La sensación de vértigo al consumir contenido de este tipo puede provocar una sensación de excitación semejante a la de ver una película de terror, de subir a una montaña rusa o de estar haciendo algo prohibido.
Además del consiguiente acostumbramiento y naturalización que hace que un mismo estímulo reiterado deje de producir la resonancia del inicio. Quien se acostumbra a ver este tipo de contenidos, se desensibiliza, lo toma como algo natural.
CAPTAR LA ATENCIÓN
Las historias truculentas son con frecuencia más llamativas y se destacan entre una multitud de noticias y entretenimientos disponibles. Frente al acostumbramiento cada nuevo estímulo tiene que ser más y más fuerte para que pueda atraer la atención.
En un entorno mediático saturado los medios compiten por quien puede tener al espectador centrado en sí. En un mundo en que el tiempo de concentración en un tema es cada vez más breve, retener la atención del usuario es un bien muy preciado.
ALGUIEN SALE GANANDO
A mayor impacto emocional, mayor participación en las redes sociales, comentarios y discusiones. Aumenta la visibilidad y un contenido irrelevante se transforma en algo de lo que todo el mundo habla, compra y consume. Desde ya que los intereses comerciales o políticos pueden influir en la elección de las historias que los medios deciden destacar, así como también son las más fáciles y menos costosas de producir que otro tipo de contenido.
Comprar contenido mediático de calidad es también responsabilidad de los consumidores.
El lector podrá seguir a Buena Data en:
YouTube: /BuenaDataOk
Instagram: @buenadata
buenadata.ar