El cardenal Jorge Bergoglio reiteró hoy que "urge" recrear las condiciones políticas e institucionales para superar "el estado de confrontación permanente que profundiza nuestros males", y reclamó "una actitud de grandeza" a todos los argentinos, en particular a sus dirigentes.
El primado argentino hizo estas observaciones al presidir el Tedéum por el 25 de mayo en la Catedral de Buenos Aires, adonde acudieron referentes opositores al gobierno, pero no la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Advirtió que el "deficiente funcionamiento" de las instituciones de la Constitución produce "un alto costo social", por lo que aseguró que "no es momento para victimizarnos ni para procurar ventajas sectoriales".
"La calidad institucional es el camino más seguro para lograr la inclusión de todos en la comunidad nacional. Por eso, es necesario que los poderes del Estado, de acuerdo a su naturaleza, actúen respetando su legítima autonomía y complementándose en el servicio al bien común", subrayó.
El arzobispo de Buenos Aires reclamó "privilegiar la sanción de leyes que respondan a las necesidades reales de nuestro pueblo, y no detenerse en opciones fijadas por intereses que no tienen en cuenta la naturaleza de la persona humana, de la familia y de la sociedad" como el aborto o el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Además, insistió en advertir que la deuda social "sigue vigente", al alertar que "si toda la Nación sufre, más duramente sufren los pobres".
En el Tedeum realizado en la Catedral metropolitana, Bergoglio optó por leer el último documento del Episcopado "La patria es un don, la Nación una tarea", en vez de pronunciar una homilía.
HERMOSO GESTO
Por otro lado calificó de "hermoso gesto" que las autoridades nacionales hayan ido a Luján a rezar por la Patria.
"Nos unimos con todos aquellos que están en Luján, encabezados por las autoridades máximas del gobierno de la Nación", sostuvo Bergoglio al iniciar el Tedeum en la catedral metropolitana, adonde acudieron referentes de la oposición.
Sostuvo que la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su gabinete en Luján es "un hermoso gesto del cual todos nos alegramos".