El presidente Alberto Fernández viajará la semana próxima a Nueva Delhi, la populosa capital de la India, para formar parte de la cumbre del G20, en su última intervención ante ese foro antes de terminar su mandato, visita con la que iniciará un periplo internacional que lo mantendrá con una agenda cargada durante todo el mes de septiembre.
Se trata de la 18ª cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del Grupo de los 20 (G20), el principal foro para la cooperación económica internacional, que tendrá lugar en la India el fin de semana del sábado 9 y domingo 10 de septiembre, con el lema "Una tierra, una familia, un futuro".
Tras uno de los veranos más calurosos de su historia, la ciudad de Nueva Delhi -en la que viven 20 millones de personas- se transformará durante dos días para recibir a los visitantes internacionales, para lo cual habrá una restricción casi total de la circulación y permanecerán cerrados supermercados, escuelas, oficinas, restaurantes y shoppings.
Ya comprometió su asistencia al encuentro el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, mientras que es probable que el presidente chino Xi Jinping no asista.
En el caso de Rusia, Vladimir Putin ya anunció que no viajará a Nueva Delhi por lo que se descuenta que la representación de Moscú estará a cargo del canciller, Sergei Lavrov.
El escenario de la cumbre será el centro de exhibiciones y convenciones llamado Pragati Maidan, que fue totalmente remodelado para la cumbre y comprende una superficie de casi 500.000 m2.
En la previa del viaje, Fernández se reunió el jueves pasado en la Casa Rosada con el embajador de la India en Argentina, Dinesh Bhatia, con quien analizó la agenda de la cumbre.
El jefe de Estado tiene previsto partir el próximo jueves hacia Nueva Delhi, donde -en paralelo a las actividades del G20- mantendrá una serie de reuniones bilaterales con mandatarios de otros países..
Fernández llega a la India días después de que el grupo de los Brics -que el país asiático integra junto a Brasil, Rusia, China y Sudáfrica- aprobara la integración de la Argentina a ese bloque de países emergentes.
La decisión se adoptó luego de que Brasil, China e India ejercieran presión sobre los otros miembros del bloque a los efectos de que Argentina ingrese el nucleamiento de economías ascendentes: el país sudamericano y socio mayor de la Argentina en el Mercosur tuvo un rol central en ese aspecto.
Ante sus pares del G20, Fernández insistirá con su planteo de discutir la arquitectura financiera global, luego de que la Casa Blanca informara en los últimos días que el propio presidente Biden abogará por reformar el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) para que ayuden mejor a los países en desarrollo, durante la cumbre de Nueva Delhi.
En una reciente entrevista con Télam, el canciller Santiago Cafiero sostuvo que el G20 es el ámbito para discutir la arquitectura financiera global y celebró que Biden quiera debatirla, en sintonía con lo que viene planteando Alberto Fernández, ya que "potencia lo que la Argentina planteará" la semana próxima en ese foro.
"El Presidente, muchas veces en soledad, planteó la necesidad de discutir una nueva arquitectura financiera global, apuntándole al FMI, que se creó para ser un prestamista en un momento de tensión por la crisis de la balanza de pago de los países, que venía a salvaguardar esa situación. Hoy está totalmente desvirtuado su objetivo", evaluó Cafiero.
El canciller explicó que la semana próxima, en la capital india, Argentina va a "volver a reclamar, como lo hizo en 2021 en Italia y en 2022 en Indonesia, un nuevo orden desde el punto de vista de la agenda de financiamiento global, del financiamiento del cambio climático y, fundamentalmente, de lo que es la arquitectura financiera global".
"Hoy, el FMI, lejos de ser una institución que ha venido a generar préstamos para salvar una situación determinada, se termina transformando en un cepo al desarrollo nacional", advirtió.
En marzo último, el Presidente mantuvo en marzo último una bilateral con Biden, en la que justamente le planteó que los organismos internacionales de crédito "deben dar una política específica para los países de renta media", que son las naciones que cargan con el 60% de la pobreza.
Por su parte, el mandatario estadounidense se comprometió a apoyar esos pedidos de Argentina.
La cita en Nueva Delhi será el tercer G20 presencial de Alberto Fernández: en noviembre del año pasado estuvo presente en Bali, Indonesia, donde sufrió una gastritis erosiva con signos de sangrado, por la que debió cancelar actividades.
Asistió también en octubre del 2021 a la cumbre realizada en Roma, Italia, mientras que en su primer año de mandato -noviembre del 2020- la reunión de los líderes del foro fue virtual por la pandemia de coronavirus, tema excluyente de aquel encuentro.
En todos esos foros, el mandatario argentino solicitó reiteradamente apoyo internacional para que el FMI eliminara las sobretasas que pesan sobre la deuda con ese organismo, e insistió en pedir un canje de deuda climática, con menores tasas de interés y mayores plazos para países como Argentina.
Generalmente, las cumbres del G20 son la oportunidad para mantener reuniones bilaterales con los jefes de Estado presentes y esta oportunidad no será la excepción: ya están casi cerradas bilaterales con el primer ministro de India, Narendra Modi, y con su par de la República de Corea, Han Duck-soo, quien estuvo el año pasado en la Argentina, informaron a Télam fuentes oficiales.
Se esperan también otros encuentros importantes, que podrían confirmarse en las horas previas a la partida.
Luego de las bilaterales y tras hacer su discurso ante los líderes del G20, Fernández dejará el país asiático el mismo domingo 10 para llegar a tiempo el lunes 11 de septiembre a Santiago de Chile, donde participará de los actos en conmemoración del 50 aniversario del golpe de Estado que encabezó Augusto Pinochet contra el entonces presidente socialista Salvador Allende.
El Presidente participará ese lunes del acto central a realizarse en el Palacio de la Moneda, sede gubernamental y epicentro de los bombardeos del 11 de septiembre de 1973; la conmemoración fue convocada oficialmente por el Gobierno de Gabriel Boric.
En la misma semana, entre el 15 y 16 de este mes, Fernández volverá a volar: esta vez lo hará a Cuba para asistir a la cumbre del G77 + China, un bloque que agrupa a la mayoría de los países en vías de desarrollo del hemisferio sur.
El G-77, creado en 1964 dentro del Movimiento de los Países No Alineados, esta integrado actualmente por 134 países de América, África y Asia, y tiene la colaboración externa de la República Popular China.
Desde la isla de Cuba, el Presidente volará a la ciudad de Nueva York para su última participación en la Asamblea General de las Naciones Unidas que se realiza cada año, pautada para el 19 y el 20 de setiembre.