El ex vicepresidente Amado Boudou cumplirá mañana un mes detenido con la expectativa puesta en obtener la libertad antes de fin de año, si se accede a beneficiarlo con una medida alternativa cuando termine el secreto de sumario impuesto en todas las causas en su contra, tras la declaración de Alejandro Vandenbroele como imputado protegido.
En tanto, se espera para mediados de diciembre, que sea nuevamente trasladado desde la cárcel de Ezeiza a los tribunales federales de Retiro para ser indagado en otra causa en su contra.
Desde que el juez federal Ariel Lijo ordenó detenerlo el 3 de noviembre pasado, las investigaciones contra Boudou tomaron un giro imprevisto luego de la aparición en tribunales de Vandenbroele, el titular del fondo de inversión The Old Fund, quien -según la Justicia- actuó como testaferro de Boudou y de su también detenido socio José María Nuñez Carmona para encarar los negocios que facilitaba su lugar en la función pública y en los cuales él no podía figurar.
Con Boudou y Nuñez Carmona presos, algo que para los investigadores influyó en su decisión, Vandenbroele despidió a sus abogados particulares y pidió incorporarse al programa de protección en calidad de imputado.
A raíz de sus dichos, Lijo impuso el secreto de sumario en las tres causas que tiene abiertas contra Boudou y otros acusados: enriquecimiento ilícito, el contrato para renegociar la deuda pública de Formosa por 7,6 millones de pesos y la llamada "ruta del dinero" en el caso Ciccone.
Por la operación central del traspaso de la imprenta, Boudou, Nuñez Carmona, Vandenbroele y otros ya son juzgados por el Tribunal Oral Federal 4, que siguió adelante con el debate tras las detenciones e incluso aceptó trasladar a los dos presos desde la cárcel de Ezeiza en dos ocasiones para que presencien el debate.
Las esperanzas de pasar las fiestas con su novia embarazada de mellizos están puestas en un fallo de la sala I de la Cámara Federal porteña, que confirmó su prisión preventiva pero sugirió al juez buscar algún método alternativo a la prisión una vez que concluya la etapa del secreto de sumario y de recolección de nuevas pruebas, derivadas de los dichos de Vandenbroele.
Mientras tanto, para mediados de diciembre se espera una nueva visita de Boudou preso a los tribunales federales de Retiro, cuando sea indagado en otra causa también a cargo de LIjo que investiga el uso de "facturas truchas" para justificar gastos en el Ministerio de Economía cuando el ex funcionario lo presidía.
El juez había citado al ex Vicepresidente para el 30 de octubre pasado, pero su defensa pidió una prórroga y poco después quedó preso por supuesto lavado de activos en una de las causas en su contra, la de enriquecimiento ilícito.
Ahora, el magistrado resolvió insistir con esa citación, para la cual será trasladado desde la cárcel de Ezeiza a mediados de diciembre, explicaron fuentes judiciales.
Además y con las causas en su contra aún bajo secreto de sumario, antes de fin de año Lijo convocará a los dos indagados que faltan en la causa por enriquecimiento ilícito que derivó en la detención, al detectarse -según los investigadores- maniobras de lavado de dinero.
Se trata de la ex novia de Boudou, Agustina Kampfer y del actual imputado protegido Alejandro Vandenbroele, ambos acusados de haber actuado como testaferros del ex Vicepresidente.
Vandenbroele declaró ante el fiscal federal Jorge Di Lello como imputado protegido y, tras avalar sus dichos ante Lijo, firmó un acuerdo para verse beneficiado con una eventual reducción de condena, pero todavía resta indagarlo como acusado en la causa por enriquecimiento ilícito en la que se detuvo a Boudou y a Nuñez Carmona.
A raíz de sus dichos y como consecuencia inmedaita, Lijo citó a nuevas declaraciones en la causa que investiga el primer contrato firmado por The Old Fund una vez constituída, cuando Boudou era Ministro de Economía, para asesorar a Formosa en la reestructuración de su deuda pública, por 7.6 millones de pesos.
Por ello fue indagado el gobernador de Formosa Gildo Insfrán, quien ayer presentó un escrito sin responder preguntas y negó los cargos.
Según fuentes judiciales, Vandenbroele complicó en su declaración como arrepentido a Nuñez Carmona, Boudou y funcionarios públicos de Formosa al dar detalles de ese contrato de consultoría que -para los investigadores- encubrió el pago de sobornos.
En lo referido a la venta de la imprenta Ciccone, luego de la declaración de Vandenbroele, se convocó a indagatoria al ex titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, quien negó haber beneficiado a The Old Fund aconsejando otorgar un plan de pagos y también el banquero Jorge Brito.
Todos declararon cuando en las causas rige el secreto de sumario, a raíz de nuevas medidas de prueba ordenadas para intentar confirmar o desmentir a Vandenbroele.