Tropas israelíes inician la retirada en un corredor de Gaza como parte de su tregua con Hamás

Las fuerzas israelíes se retiraban el domingo de un importante corredor en la Franja de Gaza, según dijeron funcionarios israelíes y Hamás. La maniobra era uno de los compromisos de Israel en el tenue cese al fuego con Hamás, que sigue avanzando pero enfrenta una importante prueba de si los dos bandos pueden negociar una extensión.

Israel acordó, como parte de la tregua, retirar sus fuerzas del corredor de Netzarim, una franja de tierra de 6 kilómetros que separa el norte de Gaza del sur, y que Israel ha utilizado como zona militar durante la guerra.

Al inicio del alto al fuego el mes pasado, Israel comenzó a permitir que los palestinos cruzaran Netzarim para dirigirse a sus hogares en el maltrecho norte del territorio, y miles de personas cruzaron Gaza a pie o en auto. La retirada de fuerzas de la zona cumplirá otro compromiso del acuerdo, que detuvo la guerra iniciada hace 15 meses.

Sin embargo, las partes parecen haber hecho pocos progresos en la negociación de la segunda fase del acuerdo, que pretende extender la tregua y llevar a la liberación de más rehenes israelíes retenidos por Hamás.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, enviará una delegación a Qatar, un mediador clave en las conversaciones entre las partes, pero la misión incluía a funcionarios de bajo nivel, lo que generó especulaciones de que no conduciría a un avance en la extensión de la tregua. Se espera que Netanyahu convoque una reunión de ministros clave del gabinete esta semana sobre la segunda fase del acuerdo, pero no estaba claro cuándo.

Por otro lado, el domingo, el Ministerio palestino de Salud dijo que una mujer palestina de 23 años que estaba embarazada de ocho meses murió baleada por fuego israelí en la ocupada Cisjordania, donde tropas israelíes han emprendido una amplia operación.

EL ALTO EL FUEGO ES FRÁGIL

Desde que comenzó el 19 de enero, el acuerdo ha enfrentado obstáculos y desacuerdos repetidos entre las partes, que hacen patente su fragilidad. Pero se ha mantenido, aumentando las esperanzas de que la devastadora guerra que provocó cambios sísmicos en Oriente Medio pueda acercarse a su fin.

El domingo se veían autos cargados con pertenencias, como depósitos de agua y valijas, dirigiéndose hacia el norte a través de una carretera que cruza Netzarim. Según el acuerdo, se supone que Israel que permitirá que los autos crucen sin inspección y no parecía haber tropas en las cercanías de la carretera.

El vocero de Hamás Abdel Latif Al-Qanoua dijo que la retirada mostraba que Hamás había “obligado al enemigo a someterse a nuestras demandas” y que frustraba “la ilusión de Netanyahu de alcanzar una victoria total”.

Los funcionarios israelíes, que hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados para discutir movimientos de tropas con los medios, no revelaron cuántos soldados se estaban retirando. Las tropas permanecen a lo largo de las fronteras de Gaza con Israel y Egipto y se espera que se negocie una retirada completa en una etapa posterior de la tregua.

Durante la primera fase de 42 días del alto al fuego, Hamás está liberando gradualmente a 33 rehenes israelíes capturados durante su ataque del 7 de octubre de 2023 a cambio de una pausa en los combates, la libertad para cientos de prisioneros palestinos y un incremento en la ayuda humanitaria para Gaza devastada por la guerra.

El acuerdo estipula que las tropas israelíes se retirarán de las áreas pobladas de Gaza, así como del corredor de Netzarim.

En la segunda fase, todos los rehenes restantes serían liberados a cambio de una retirada completa israelí de Gaza y una “calma sostenible”.

Pero los detalles más allá de eso no están claros y los repetidos obstáculos a lo largo de la primera fase y la profunda desconfianza entre las partes han puesto en duda si pueden concretar la extensión.

MUCHOS DESAFÍOS, INCLUIDO EL DE TRUMP

Israel ha dicho que no aceptará una retirada completa de Gaza hasta que se eliminen las capacidades militares y políticas de Hamás. Hamás dice que no entregará los últimos rehenes hasta que Israel retire todas las tropas del territorio.

Mientras tanto, Netanyahu está bajo una fuerte presión de sus aliados políticos de ultraderecha para reanudar la guerra después de la primera fase para que Hamás, que llevó a cabo el ataque más mortífero en la historia de los israelíes, pueda ser derrotado. También enfrenta presión de israelíes ansiosos por ver el regreso de más rehenes a casa, especialmente después de que el aspecto demacrado de los tres hombres liberados el sábado conmocionara a la nación.

Algo que complica aún más las cosas es una propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de trasladar la población de Gaza y tomar posesión del territorio palestino. Israel se ha mostrado abierto a la idea, mientras que Hamás, los palestinos y el mundo árabe en general la han rechazado de plano.

El plan sugerido está plagado de obstáculos morales, legales y prácticos. Pero pudo haber sido propuesto como una táctica de negociación por Trump, para intentar aumentar la presión sobre Hamás o como una jugada inicial en un proceso de negociación destinado a asegurar un acuerdo de normalización entre Israel y Arabia Saudita. Ese gran acuerdo parecía estar tambaleándose el domingo cuando Arabia Saudita condenó las declaraciones de Netanyahu, quien dijo que los palestinos podrían crear su estado en ese territorio.

Arabia Saudita dijo que sus declaraciones “pretenden desviar la atención de los crímenes sucesivos cometidos por la ocupación israelí contra nuestros hermanos palestinos en Gaza, incluida la limpieza étnica a la que están siendo sometidos”.

En una entrevista el jueves con el Canal 14 de Israel, Netanyahu dijo que “los saudíes pueden crear un estado palestino en Arabia Saudita; tienen mucho terreno allí”.

Los Emiratos Árabes Unidos, que alcanzaron un acuerdo de reconocimiento diplomático con Israel en 2020, también condenaron las declaraciones de Netanyahu el sábado por la noche. (AP)