"Si una persona es gay, busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?"
En el viaje de regreso a Roma, el Papa dijo que no juzga a los homosexuales, pero se mostró contrario al lobby gay. "Debemos ser mas hermanos, el problema es hacer el lobby, de esa tendencia, o de políticos, masones. Ese es el problema mas grande", explicó. Negó haber encontrado resistencias para emprender la reforma a la Curia.
Ciudad del Vaticano - El papa Francisco dejó en claro que no juzga a los homosexuales, pero se mostró contrario al lobby gay. En pleno vuelo de regreso de Brasil, el líder de la Iglesia hizo estas declaraciones a los periodistas que lo acompañaban.
"En un lobby no todos son buenos, pero si una persona es gay, busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla? El catecismo de la Iglesia Católica explica y dice que no se deben marginar a esas personas y que deben ser integradas en la sociedad", afirmó.
Francisco aseguró que el problema no es tener esa tendencia. "Debemos ser mas hermanos, el problema es hacer el lobby, de esa tendencia, o de políticos, masones. Ese es el problema mas grande", explicó.
Jorge Bergoglio hizo estas manifestaciones en el avión que le llevó hoy de vuelta de Río de Janeiro a Roma, en el que habló con los periodistas que le acompañaban durante una hora y media, contestando a todas las preguntas que le hicieron en total libertad.
El Papa también se refirió a la reforma de la Curia romana y aseguró que no ha notado "resistencia" dentro del Vaticano a la reforma, pero que lo esencial es "la transparencia y la honradez".
Consultado sobre la reforma del Instituto para las Obras de Religión (IOR), conocido como el banco del Vaticano, envuelto desde hace años en escándalos de supuesto blanqueo de dinero, y a la comisión que ha creado para que estudie qué hacer con el llamado "banco de Dios".
"Yo no sé como acabará el IOR. Algunos dicen que tal vez sea mejor (convertirlo) en un banco, otros que un fondo de ayudas y otros que hay que cerrarlo. Yo no lo sé, me fío del trabajo de las personas que están trabajando en esto", dijo.
El Papa habló también de la canonización de los papas Juan XXIII y Juan Pablo II, que no será el 8 de diciembre próximo, como se pensó en un principio, debido a que el frío dificulta el viaje de fieles polacos a Roma.
Agregó que las fechas que se barajan actualmente son el 24 de noviembre próximo, festividad de Cristo Rey, o el 27 de abril de 2014, festividad de la Divina Misericordia. (EFE)