Recuerdos de sangre y espanto

Los relatos de los verdaderos protagonistas de esta historia, los heridos, se mostraban en algunos casos como confusos. A pesar de ello, muchos llevaban un mismo hilo conductor: algún objeto impidió la normal salida de los espectadores. A continuación, se reproducen algunos testimonios recogidos por periodistas de La Prensa en aquellos días del "68.

* "Una vez que me caí por la avalancha, logré arrastrarme hasta una de las paredes y comenzaron a caer sobre mí otras personas. En ese momento de confusión, observo cómo dos personas sacaban los molinetes. Luego perdí el conocimiento" (Julio Bazán).

* "La puerta podría tener una abertura de no más de un metro. En ningún momento recuerdo haber visto los molinetes" (Jerónimo E. Scheffer).

* "No sé si la puerta estaba abierta o no. Pisé sobre uno de los molinetes y salté sobre la gente. Desperté acá en el hospital" (Roque Ramón López).

* "Comenzamos con un amigo a bajar por las escaleras. De pronto, los que estaban adelante no avanzaban. Yo logré correrme y me quedé con las manos apoyadas contra la pared. Entre mi cuerpo y el muro había un chico que me pedía por favor que no lo aplaste. Rodé y logré ver la cara congestionada de un hombre. De su boca brotó un chorro de sangre que cayó sobre mí. Cuando recuperé el conocimiento busqué a mi amigo, luego supe que había muerto y creo que ese chico también" (Víctor Hugo Palacio).

* "Fui empujado con gran violencia y di mi cara contra la puerta de salida. Me incorporé, recuerdo que me tomé de un pasamanos y grité para que no siguieran bajando. Una persona me tomó del brazo y gritó para que me den aire boca a boca" (Jorge Dante Merli).