Mal de ciudad

Para 2030 se calcula que 6 de cada 10 personas residirán en ciudades. La tendencia marca la necesidad de ‘preparar’ la zonas urbanas, mediante diversas medidas que van más allá de lo sanitario, para que el inminente crecimiento demográfico no genere un impacto negativo sobre la salud. Qué están haciendo la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano al respecto.

El sostenido crecimiento del número de habitantes en zonas urbanas hace que la vida en la ciudad adquiera características distintivas, con diversos efectos sobre la salud de las personas. Es por eso que el concepto de ‘salud urbana’ adquiere cada vez mayor relevancia, al abarcar cuestiones tales como el agua, el medio ambiente, la violencia y los traumatismos, las enfermedades no transmisibles y sus factores de riesgo como el uso de tabaco, una alimentación poco saludable, la inactividad física, el uso nocivo del alcohol y los riesgos asociados a los brotes de enfermedades.

Según advierten la Organización Mundial de la Salud (OMS) y su oficina regional para las Américas, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), “prácticamente todo el crecimiento demográfico durante los próximos 30 años tendrá lugar en las zonas urbanas”, siendo en la actualidad la región de América Latina y el Caribe “la más urbanizada del mundo: más de tres cuartos de sus 433 millones de habitantes están concentrados en ciudades”.

La proyección hace que los expertos consideren la temática de urbanización y salud como el “gran reto” de este siglo, lo cual también ha motivado que sea el tema central del Día Mundial de la Salud 2010, que se celebrará el miércoles próximo.

“­Los principales determinantes sociales de la salud en el contexto urbano van más allá de lo puramente sanitario e incluyen las infraestructuras, el acceso a los servicios sociales y de salud, el gobierno local, y la distribución de los ingresos y las oportunidades en materia de educación”, destacan.­

Sobre este tema se refirió en una entrevista con La Prensa el doctor Luis Roberto Escoto, consultor en Salud Familiar y Comunitaria de la OPS/OMS Argentina, quien además describió el panorama en el área de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.

- ¿Por qué se decidió tomar el tema `salud urbana' como eje central del festejo del Día Mundial de la Salud 2010?­

- Porque en la actualidad más de 3.000 millones de personas viven en las ciudades. Se calcula que en 2007, por primera vez en la historia de la humanidad, la población residente en ciudades superó el 50%. Para 2030 se calcula que 6 de cada 10 personas residirán en ciudades y esto es una tendencia creciente. Incluso, esto podría acelerarse por el tema del cambio climático, donde se están afectando grandes zonas de la tierra, obligando a desplazar importantes segmentos de la población, que casi con seguridad van a buscar las ciudades. Así se incrementará de una manera muy acelerada la población residente en ciudades.­

- Ante este panorama se ve la necesidad de prestar especial atención a la urbanización.­

- Exactamente, porque en la medida que la población está viviendo en las ciudades, hemos podido identificar que los problemas de salud en la ciudad adquieren una dimensión y complejidad muy grande. Tanto es así, que algunos de los grandes expertos y científicos en los temas sanitarios, ya han planteado que la salud urbana es el gran tema de la salud pública del siglo XXI.­

- ¿Qué cuestiones definen el concepto de salud urbana?­

- Cuando hablamos de urbanismo, hablamos de múltiples y complejos problemas: acceso a servicios básicos, por ejemplo, agua y eliminación de excretas, hablamos de transporte público, de todos los problemas de medio ambiente, de violencia, lesiones, enfermedades cardiovasculares, enfermedades cerebrovasculares, ambientes contaminados, regímenes alimenticios no saludables, inactividad física. También se ha notado el incremento del consumo nocivo del alcohol, el consumo de drogas ilícitas, y se ve cómo los brotes epidémicos adquieren proporciones más grandes y a una velocidad más rápida en los contextos urbanos.­

- ¿Por qué sucede esto en los grandes conglomerados de población?

- Estamos hablando en este momento de alrededor de 20 ciudades en el mundo, de más de 10 millones de habitantes. Manejar la situación sanitaria de una concentración tan grande, no planificada, en un contexto social, económico y político complejo, con factores y determinantes sociales que van muchísimo más allá del sector salud, y que no están preparados para abordar toda esta complejidad, realmente representa un desafío sin antecedentes en la historia y de una envergadura muy grande. Es por eso que con esta celebración se quiso hacer un llamado de atención a la humanidad para pensar y verlo con una mayor seriedad, y sobre todo, con un abordaje intersectorial, interdisciplinario, que vaya mucho más allá del propio sector salud, que es el que menos puede aportar para resolver estos problemas.­

­CONTEXTO LOCAL

- ¿En qué situación está la Ciudad de Buenos Aires en términos de salud urbana?­

- Es difícil separar la Ciudad de Buenos Aires del conurbano bonaerense. Por lo que estamos hablando de una ‘mega ciudad’ con toda la complejidad que mencioné. La Ciudad de Buenos Aires, con sus 3 millones de habitantes, en términos relativos, tiene muy buenas condiciones de salud. Si uno lo ve comparativamente con otras ciudades, encuentra sectores de la ciudad que no están con muy buenas condiciones sanitarias, pero en general, uno puede decir que la ciudad tiene muy buenos indicadores de salud, tiene una red de servicios muy importante y hay una concentración muy grande de efectores sanitarios, hospitales públicos y privados. Lógicamente, es difícil hacer la disección entre la Ciudad y el Gran Buenos Aires de modo que­ ­uno tiene que ver esto en el contexto en que está inserta la ciudad: estamos hablando de 14 millones de habitantes, con un ingreso de 700.000 a 1 millón de autos diarios, entonces se complejiza mucho más la problemática sanitaria. Tenemos algunas zonas del conurbano, realmente en condiciones sanitarias muy preocupantes.­

- ¿A qué se debe esto?­

- Si uno hace un análisis de los efectores de salud y los ve por habitante, uno podría incluso pensar que hay un exceso en algunos casos. Lo que pasa es que no están distribuidos de la mejor manera. Y el tema del crecimiento en algunas regiones del conurbano bastante acelerado, ha limitado poder llevar al mismo ritmo una respuesta. También ha faltado una continuidad en determinadas políticas que ahora vemos que se están retomando. Tanto por la Provincia como por la Ciudad y se están haciendo esfuerzos por realizar un trabajo de mayor coordinación. Esperamos y confiamos en que si se siguen institucionalizando y sosteniendo muchas de las políticas que se están tomando, tanto desde Nación como desde Provincia y Ciudad, probablemente se podrán tener en un futuro mejores resultados.­

­PREOCUPANTE

- De los temas que conforman el concepto de salud urbana ¿cuáles son los que presentan en la Argentina un mayor desafío?­

- Hay temas que son altamente preocupantes como el de los traumatismos y muertes ocasionados por el tránsito; las enfermedades cardiovasculares preocupan por el incremento de la obesidad y el incremento del sedentarismo en grandes sectores de la población. Otro tema es el VIH/Sida, que está subiendo, y la tuberculosis. El consumo nocivo o peligroso de alcohol en los jóvenes; el tabaquismo que en vez de disminuir se ha incrementado; el cáncer... son todos temas que están en la mesa, que son de preocupación para la Ciudad y el conurbano, y que deberían tener un abordaje fuerte de parte de la ciudadanía, del Estado y de la comunidad en su conjunto.­

- ¿Cómo evalúan desde la OPS/OMS la planificación de la Ciudad y la atención que se le da al área urbana?­

- En términos generales, debo decir que hemos visto algunas señales importantes. Hay algunas propuestas como la red de ciclovías, que está incrementando aceleradamente dentro de la ciudad, lo que está promoviendo que más gente se mueva en bicicleta en la Ciudad; el tema del reordenamiento de algunas avenidas, calles principales, favoreciendo la mayor movilización del transporte público, eso es positivo. También el desarrollo urbanístico que se está promoviendo en algunas de las villas, donde hemos podido confirmar que hay una tendencia a mejorar las condiciones sanitarias, el ordenamiento urbano, las condiciones de vivienda de algunas de las villas más importantes de la ciudad. Hemos visto además cómo se está trabajando en mejorar los espacios públicos y en el incremento de los espacios verdes En general, podemos decir que hay una preocupación por el tema de la urbanización que está sobre la agenda política y que se están tomando algunas medidas que creemos que traerán o ya están teniendo algún beneficio para la población de la ciudad. Pero esto requiere una continuidad y los resultados se van a ver en el mediano o largo plazo. Por eso es fundamental que estas medidas se conviertan en una política de Estado y que se le pueda dar continuidad en el tiempo.­

- ¿Qué rol debe adoptar el ciudadano en este proceso?

- Sería importante que la sociedad se involucre en estos temas, que participe de las actividades que la ciudad está promoviendo, que se sume a todo este movimiento. Porque en la medida en que el Estado se mueva, invierta, defina políticas y la ciudadanía se incorpore, participe, esté pendiente, vea las cosas que está haciendo la Ciudad y contribuya con su aporte, se obtienen muchos mejores resultados. Por otro lado, la ciudadanía debe exigir, cuando corresponde, la salud como un derecho; porque en la medida que los habitantes de la ciudad se incorporan y se empoderan reconociendo que la salud es un derecho y demandan el cumplimiento de ese derecho, entonces las políticas públicas se convierten en una realidad concreta y se garantiza la sostenibilidad de las medidas.­