Lopérfido presentó su renuncia como ministro de Cultura porteño

El ministro de Cultura porteño, Darío Lopérfido, renunció hoy al cargo, a menos de siete meses de haber asumido, en medio de las polémicas con organismos de derechos humanos y artistas por sus declaraciones sobre la dictadura y la gestión cultural del kirchnerismo.

El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, ratificó esta tarde la renuncia de Lopérfido y confirmó que continuará como director artístico del Teatro Colón, después de que el funcionario denunció ayer una "operación" en su contra y negó su salida.

"Coincidimos con Darío en que era mejor que se concentre en la dirección artística del Teatro Colón, trabajando con la directora general, María Victoria Alcaraz", dijo en un comunicado el mandatario comunal. 

Lopérfido, quie fue secretario de Cultura del ex presidente Fernando de la Rúa, comenzó a ser cuestionado en enero por representantes de organismos de derechos humanos e intelectuales por haber puesto en duda la cantidad estimada de personas desaparecidas durante la última dictadura.

"No tengo ningún inconveniente en decirlo: en la Argentina no hubo 30 mil desaparecidos, fue una mentira que se construyó en una mesa para obtener subsidios que te daban", dijo Lopérfido en enero durante un mesa de debate en Pinamar.

Las declaraciones del ex integrante del Grupo Sushi durante la gestión de la Alianza provocó expresiones de repudio de dirigentes de derechos humanos e intelectuales, que reclamaron su renuncia.

El pedido local de renuncia del ministro porteño se apoyó en una campaña internacional en la página Change.org, que reunió 10 mil firmas de intelectuales respetados como los filósofos franceses Alain Badiou y Jean-Luc Nancy, que consideraron las declaraciones de Lopérfido "un claro intento de banalizar y restar importancia a las atrocidades cometidas en esos años".

En los meses en que Lopérfido continuó en el cargo, recibió también críticas de los trabajadores de la cultura, que lo declararon persona non grata después de que el funcionario afirmó que el kircherismo ejecutó "el mayor fraude de la historia audiovisual argentina" y había "comprado voluntades" entre los artistas.

A raíz de estas nuevas declaraciones, Lopérfido sumó expresiones de repudio de actores como Rita Cortese, Gustavo Garzón y Luis Machín, y atravesó escraches y abucheos en actos oficiales y lugares públicos.

La relación entre Lopérfido y dirigentes de derechos humanos, artistas e intelectuales fue tensa hasta último momento, ya que el viernes fue escrachado en el teatro Regio de esta capital, durante la presentación del ciclo teatral itinerante.

Durante ese acto, en el que estaba presente Rodríguez Larreta, decenas de personas entraron al salón con máscaras y pancartas para exigir su renuncia.

Además de haber sido parte del gobierno de la Alianza entre 1999 y 2000, siempre ligado al ámbito de la cultura, Lopérfido dirigió en los 90 el Centro Cultural Ricardo Rojas, fue subsecretario de Extensión Cultural de la Universidad de Buenos Aires y en los últimos años estuvo al frente del Festival Internacional de Buenos Aires.