La Presidenta anunció que presentará un proyecto de reforma del Código Procesal Penal

La presidenta Cristina Fernández anunció que "en los próximos días" enviará al Congreso un proyecto para "un nuevo Código de Procedimiento Penal Nacional", al tiempo que fustigó a la oposición por "no respetar la voluntad popular" y "escapar por una puerta" para no votar el Código Civil y Comercial.

Durante un discurso que pronunció en la Casa de Gobierno para promulgar el flamante Código Civil y Comercial, la jefa del Estado explicó que el objetivo del Código Procesal Penal que el Ejecutivo pondrá a consideración de los legisladores "transforma el actual sistema inquisitivo en acusatorio para hacerlo mucho más ágil".

"Nos va hacer vivir en una sociedad con más seguridad y certidumbre", aseguró.

 Fernández de Kirchner aprovechó la circunstancia de elevar otra iniciativa al Congreso para fustigar a los diputados de la oposición que el miércoles pasado se levantaron de sus bancas para no sancionar la reforma al Código Civil y Comercial.

"La sociedad no reclama que estemos todos de acuerdo, reclama que tengamos la valentía de sentarnos a debatir las diferencias y no escapar por una puerta para no debatirlas", advirtió.

Enfatizó en este sentido que "si el otro tiene mayores posibilidades, mejores debates o tiene la mayoría -porque no estamos sentados en las bancas por obra del Espíritu Santo sino por obra de la voluntad popular- ti creo que eso es respetar y dar institucionalidad a la República".

"No se puede seguir hablando de democracia ni de instituciones ni de derechos cuando no se respeta la voluntad expresada en las urnas", les advirtió a la oposición.

En la cadena nacional número 23 en lo que va del año, la presidenta anunció la reforma del Código de Procedimientos Penal a través de una iniciativa del gobierno que se elevará al Congreso.

"Debe ser ágil porque se necesita que el "culpable sea condenado en forma rápida" y "si es inocente, no podemos tener a una persona tres o cuatro años en el sistema carcelario".

Señaló que el "proceso sigue siendo escrito, muy ritualista, donde los jueces controlan la legalidad de su propio trabajo, los juicios orales son mínimos y replican la instrucción, no existen vías alternativas como la mediación penal, los recursos dilatan le proceso y hay saturación".

En este marco, resaltó entonces la necesidad de redactar uno nuevo "porque va a dar respuesta a la demanda de justicia por parte de la ciudadanía".

Justificó la reforma proyectada porque "el Código actual, que data de 1991, recogió un sistema mixto que "no está funcionando ni cubre las expectativas" y afirmó que "se estima que los procesos penales duran no menos de cuatro años" y por esto "la a idea es brindar un instrumento a través de un sistema acusatorio puro, como en Chile, donde los procesos duran entre 3 y 6 meses".