Cuando Talleres jugaba el mejor fútbol de país

El baúl de los recuerdos. Dirigida por Roberto Marcos Saporiti, La T se llevó todos los aplausos en el Nacional de 1977. Si bien perdió el título en una histórica final contra Independiente, el equipo cordobés quedó en el recuerdo por el gran nivel que mostró en el certamen.

"¡Sol y luna, sol y luna, esta noche nos comemos a los pollitos de Labruna!". El cantito brotaba de las tribunas de La Boutique. La cancha de Talleres albergaba una ilusión enorme. Es que el equipo de Roberto Marcos Saporiti jugaba bárbaro. Con grandes futbolistas y un respeto reverencial por la pelota, no sólo cosechaba aplausos, sino que coleccionaba triunfos. Lideraba el Grupo C del Nacional de 1977 y recibía a River, el campeón del Metropolitano y principal proveedor de futbolistas para la Selección argentina que se preparaba para el Mundial ´78. Si bien el conjunto de Angel Labruna estaba un tanto lejos de la punta, era un rival temible. Sin embargo, con un golazo de José Daniel Valencia, Talleres se quedó con la victoria y se afianzó en la cima de la tabla. En esa época, la revista El Gráfico colmaba de elogios a La T, al punto de sostener que mostraba “el mejor fútbol del país”.

“River fue un pretexto para llegar hasta Córdoba. El fenómeno Talleres ya trascendió las fronteras de este Nacional. Cinco jugadores en la preselección. Un pueblo que lo sigue. Dirigentes que lo saben respaldar. Una saludable revolución. Un equipo que quizá le cambie la cara al fútbol argentino”, explicó la memorable publicación que durante años fue La Biblia del Deporte Argentino.  No era para menos. Todos hablaban de ese Talleres en el que coexistían el Rana Valencia, el Hacha Luis Antonio Ludueña, Luis Galván, el goleador Humberto Rafael Bravo, Miguel Angel Oviedo -todos en la mira de César Luis Menotti para el Seleccionado nacional-, la Pepona José Omar Reinaldi… Tenía mucho talento el equipo del Sapo

River llegó a La Boutique en la 10ª fecha del certamen. Talleres acumulaba 14 puntos, dos más que Racing, su escolta, y llevaba seis triunfos consecutivos. Su última derrota había sido un 3-0 justamente contra los millonarios en la 3ª jornada. Los de Labruna sumaban 9 unidades y alternaban espectaculares victorias con traspiés inesperados.  Si pretendían ser protagonistas de la lucha por el título, debían ganar esa noche de miércoles.

Cerca de 25 mil personas se apiñaban en las tribunas. La expectativa era enorme. ¿La presión acorraló a Talleres? No, para nada. Las huestes de Saporiti salieron a la cancha como lo habían hecho siempre en ese Nacional: apostar a ganador y a jugar bien. No admitían otra fórmula.  Y no bien Carlos Espósito ordenó el puntapié inicial, los cordobeses se abalanzaron sobre el arco que defendía Ubaldo Matildo Fillol. El Pato le negó el gol a Ricardo Cherini. Valencia falló por poco luego de haberle tirado un caño a Hugo Coscia… 

Labruna había pensado un partido en el que River, con figuras como Daniel Passarella, Juan José López, Norberto Osvaldo Alonso, Víctor Marchetti (había regresado después de su gran paso por Unión) y Leopoldo Jacinto Luque, manejara los tiempos. Hasta se acercó alguna vez al arco cordobés obligando a responder al Rubén Guibaudo... Sin embargo, se encontró con un adversario que se lo llevó por delante con la exacta combinación de ambición y buen fútbol.

Saporiti le agregó al esquema ofensivo la presencia de la Pepona Reinaldi en lugar del Hacha Ludueña. No le preocupaba despoblar el mediocampo. Labruna, en cambio, sumó marca con el ingreso de Héctor Artico por el Negro López… Talleres seguía buscando. El gol tenía que llegar como consecuencia directa de la creatividad puesta al servicio de la victoria. No podía producirse por un intento aislado o fortuito. Y el tanto que consumó el triunfo respetó fielmente esa idea. Valencia, habilidoso, inteligente, un crack, sacó un zurdazo inatajable para el Pato. Un golazo.

El público cordobés deliraba. Volvió el "¡sol y luna, sol y luna, esta noche nos comemos a los pollitos de Labruna!”. Fue la confirmación no sólo de que Talleres estaba cumpliendo una fantástica campaña en el Nacional, sino de que en este entonces, como aseguraba El Gráfico, jugaba “el mejor fútbol del país”.

LA SINTESIS

Talleres 1 - River 0

Talleres: Rubén Guibaudo; Rodrigo Astudillo, Luis Galván, Víctor Binello, Victorio Ocaño; Luis Antonio Ludueña, Antonio Syeyyguil, José Daniel Valencia; Héctor Bocanelli, Humberto Rafael Bravo, Ricardo Cherini. DT: Roberto Saporiti.

River: Ubaldo Matildo Fillol; Rodolfo Raffaelli, Daniel Lonardi, Daniel Passarella, Héctor López; Juan José López, Víctor Marchetti, Norberto Alonso; Carlos Seppaquercia, Leopoldo Jacinto Luque, Hugo Coscia. DT: Angel Labruna.

Incidencias

Segundo tiempo: 16m José Omar Reinaldi por Ludueña (T); 20m Héctor Artico por J.J. López (R); 27m gol de Valencia (T); 32m Emilio Nicolás Commisso por Seppaquercia (R).

Cancha: Talleres. Arbitro: Carlos Espósito. Fecha: 21 de diciembre de 1977.