Accidentes domésticos y niños: cómo evitar los peligros que se esconden en la casa

Ocasionan unas 950.000 muertes al año en menores de 18 años y constituyen la primera causa de muerte en menores de edad a nivel mundial. Especialistas del Hospital de Clínicas de la UBA proponen un abordaje integral para adoptar medidas frente a hábitos cotidianos con el objetivo de evitar accidentes comunes como golpes, caídas o quemaduras.

Muchos de los accidentes domésticos ocurren por desconocer todos los riesgos que existen dentro del hogar, aseguran especialistas del Hospital de Clínicas de la UBA, quienes proponen un abordaje integral para adoptar medidas frente a hábitos cotidianos para evitar accidentes comunes como golpes, caídas o quemaduras.
Con el comienzo de las vacaciones de invierno, los niños pasan más tiempo en sus casas, en muchos casos estos lugares no se encuentran correctamente preparados para su seguridad. “Los principales riesgos en los hogares están relacionados con caídas, quemaduras, ahogamientos, atragantamientos, estrangulaciones, asfixias, choques automovilísticos y electrocuciones, por lo que se debe estar atentos a muchos factores y circunstancias en el hogar”, resalta la doctora Vanesa Fulco de la División Pediatría del Hospital de Clínicas de la UBA. 
Se estima que las lesiones representan una de las principales causas de muerte infantil, con cerca de 950.000 muertes anuales en menores de 18 años. En los niños de 1 a 3 años, las lesiones causan el 30% de las defunciones, aumentando al 40% en niños de 4 años y al 50-60% en aquellos entre 5 y 17 años. 
“Las lesiones por ahogamiento, traumatismos causados por el tránsito y quemaduras por fuego son las principales causas de muerte en niños de 1 a 4 años. A partir de los cinco años, predominan los traumatismos causados por el tránsito, ahogamientos e incendios. Los accidentes domésticos más comunes ocurren en la cocina y el baño, y a menudo se deben a la falta de supervisión o a un adulto distraído”, alerta la profesional.
HOGARES NO PREPARADOS
“En la mayoría de los casos, los hogares no están preparados adecuadamente para albergar niños. Es esencial instalar protectores en escaleras y puertas, asegurar las ventanas y retirar o cubrir muebles con puntas duras. Las alarmas de incendio deben ser probadas mensualmente. En el caso de tener piletas, estas deben estar cercadas completamente, y las cunas o camas no deben estar cerca de ventanas con cortinas que puedan estrangular al niño. Los barrotes de las cunas no deben superar los 6 cm de distancia entre ellos con el fin de evitar que el bebé introduzca la cabeza o alguna extremi­dad entre ellos y pueda quedar atrapado”, sostiene la especialista.
INTOXICACIONES
“Las intoxicaciones accidentales son un riesgo significativo para los menores de edad, especialmente entre el primer y tercer año de vida. Durante esta etapa, los niños son especialmente curiosos y exploradores, lo que aumenta su vulnerabilidad a entrar en contacto con sustancias peligrosas. Una de las causas más frecuentes de intoxicación infantil es la ingestión de medicamentos. Estos suelen encontrarse en mesas de luz, otros muebles, bolsos, carteras o botiquines accesibles a los niños. Para prevenir este tipo de intoxicaciones se recomienda siempre guardar los medicamentos bajo llave, conservarlos en sus envases originales (ya que suelen ser menos llamativos) y evitar tomar medicación frente a los niños. No se recomienda provocar el vómito o administración de leche luego de la ingesta de cualquier tóxico. Estas conductas son muy habituales de observar luego de ingestas y pueden ser perjudiciales para la salud del intoxicado”, comenta Gabriel Arcidiacono, jefe de la División Toxicología del Hospital de Clínicas de la UBA.
Después de los medicamentos, los productos de uso doméstico son los más comunes en casos de intoxicación. “Algunos de estos productos pueden ser abrasivos y causar graves lesiones. Los niños pueden sentirse atraídos por las etiquetas llamativas y el hecho de ver a los adultos usarlas. Los casos de intoxicación más comunes son con detergentes, lavandina y plaguicidas, en todos los casos se recomienda contactar inmediatamente con los teléfonos de centros de intoxicación”, recomienda el especialista.
“Por otro lado, también suele ser frecuente la intoxicación por la ingesta de plantas de decoración o sus frutos.  Muchas plantas como la oreja de elefante son muy irritantes al ser ingeridas y causan mucho dolor. Las adelfas pueden ser muy vistosas y son tóxicas. Otras plantas tóxicas que presentan frutos redondos como el paraíso suelen ser llamativas para los niños. Es importante que ante un accidente con las plantas llevar una muestra de la planta o una foto de la misma y en caso de exposición de piel y mucosas a sustancias tóxicas, se recomienda el lavado intenso con agua abajo de la canilla por lo menos 15 minutos de la piel expuesta o de los ojos. Luego concurrimos a la guardia para  una valoración médica”, sostiene Arcidiacono. 
Arcidiacono también recomienda que en menores de seis meses es importante evitar el empleo de adornos (cadenitas, cintas, cordones) especialmente si se llevan en el cuello y las piezas pequeñas ya que es común ver casos en la guardia de menores que tragan este tipo de objetos.
La mayoría de los accidentes ocurren porque los padres no son conscientes de las capacidades de sus hijos. Por ejemplo, “un niño puede aprender a trepar antes de caminar y agarrar objetos inesperadamente. Dejar una taza con líquido caliente al alcance del niño es considerado un acto negligente. Mantener a un niño en brazos mientras se manipulan alimentos o bebidas calientes también es peligroso, ya que cualquier movimiento brusco puede causar quemaduras graves”, comenta Fulco.
¿Cuándo hay que acudir a un profesional? Se debe acudir a la guardia después de una caída si el niño no responde o actúa de manera anormal, si presenta vómitos no relacionados con la comida, o si sufre una quemadura. En caso de atragantamiento, la urgencia del episodio requiere asistencia inmediata y consulta médica posterior.
RECOMENDACIONES
Fulco hace una serie de recomendaciones prácticas respecto a los principales riesgos frente a accidentes a los que se enfrentan los niños:
*Puertas del baño cerradas: Mantener la puerta del baño siempre cerrada cuando no esté en uso.
*Supervisión constante: Nunca dejes a un niño sin supervisión en una bañadera, aunque haya poca agua.
*Cortar y triturar alimentos: se recomienda cortar y triturar los alimentos, especialmente los duros, pequeños o redondos.
*Evitar objetos pequeños: Es importante mantener los objetos pequeños fuera del alcance de los niños.
*Alimentos seguros: No des a los niños alimentos resbaladizos como maníes, uvas enteras o caramelos duros.
*Evitar aparatos eléctricos cerca de niños: No uses secadores de pelo, afeitadoras u otros aparatos eléctricos cerca de niños, especialmente en condiciones húmedas.
*Sin supervisión en el auto: Nunca dejes a los niños solos en el auto, son muy comunes los casos de asfixia por tal motivo.
*Precaución con enchufes: Usa tapones para enchufes y mantener los cables eléctricos fuera del alcance de los niños.
“La prevención de accidentes domésticos es una responsabilidad de los adultos y un derecho de los niños. Tomar medidas preventivas y estar atentos a los posibles peligros puede marcar la diferencia entre un hogar seguro y un accidente grave”, finalizan los especialistas