El escándalo por la fiesta de Olivos fue mejor aprovechado por el kirchnerismo en la interna del Gobierno que por la oposición en la externa. A poco de difundirse una segunda foto del cumpleaños de la primera dama, desde un sector del oficialismo trascendió que la periodista que dio la primicia había mantenido una relación personal con el vocero presidencial, Juan Pablo Biondi. Los cañones apuntaron de inmediato contra el funcionario por la filtración, mientras que desde la Jefatura de Gabinete aclaraban que esa relación había sido interrumpida por el vocero largo tiempo atrás.
Lento "strip tease"
El de Biondi es uno de los cargos en el Ejecutivo a los que aspira La Cámpora y el entorno de la vice. La remodelación de gabinete que se espera para después de las elecciones comprende a otros dos funcionarios de la mayor cercanía de Alberto Fernández: el secretario general Julio Vitobello y la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra. Antes de la presentación de las candidaturas, La Cámpora había intentado desplazar a Santiago Cafiero, pero la jugada falló. Si la próxima vez tiene éxito, a partir de diciembre el Presidente quedará rodeado por funcionarios que respondan a CFK.
Riesgo país
La economía está tan deprimida que no registró el impacto del escándalo de la fiesta en Olivos. Pero hubo algunas señales de alarma. Entre ellas, la del riesgo país que volvió a niveles casi iguales a los previos al acuerdo por la deuda alcanzado por Martín Guzmán. Los empresarios y banqueros que habían apoyado el canje están alarmados por el deterioro de Alberto Fernández y el avance de la vice. La expectativa local tampoco es buena. En julio, el superávit comercial fue de 1.527 millones de US$, pero el BCRA sólo agregó a las reservas 144 millones. Ese es el costo de usar el dólar como ancla.
Números muy parejos
Una encuesta de Federico González y Asociados realizada en la provincia de Buenos Aires entre el 8 y el 13 de este mes, sobre 4.000 casos, da empate entre el Frente de Todos y la coalición opositora Juntos. Sin indecisos ni votos en blanco, el kirchnerismo registra una intención de voto del 33,1%, mientras que Juntos alcanza el 33% sumando los votos a las candidaturas de Diego Santilli y Facundo Manes. Los votos perdidos por el FdT respecto de 2019 hay que buscarlos en la candidatura de Florencio Randazzo que tiene una intención de voto del 11.7%. Espert suma el 6.5% y la izquierda el 5,6%.¸··