Roma - El Estado Islámico (EI) arengó en italiano a sus "lobos solitarios" a atacar ese país usando vehículos como armas y, con otro video grabado en Marawi (Filipinas), amenazó al papa Francisco.
"Recuerden esto, descreídos, llegaremos a Roma", desafía en inglés una voz mientras varios integristas destruyen estatuas de Cristo y despedazan un póster con el rostro de Bergoglio.
Los inquietantes mensajes se conocieron el mismo día en que la policía peninsular y un centenar de inmigrantes y refugiados africanos protagonizaron una batalla campal en el centro de la capital que causó un saldo de al menos 2 detenidos y 13 heridos -incluidos agentes-, además de despertar las críticas de la Iglesia, Unicef y Médicos Sin Fronteras (MSF) al accionar de los uniformados.
Los enfrentamientos comenzaron a la madrugada, cuando una legión de efectivos, munidos de escudos y bastones y apoyados por camiones hidrantes, procedieron a desalojar a los extranjeros, entre ellos mujeres, abuelos, discapacitados y niños, que acampaban desde el sábado en la capitalina plaza Independencia, cerca de la estación de Termini, adonde habían llegado tras ser expulsados de un edificio que ocupaban de manera ilegal desde hacía 4 años en la cercana Vía Curtatone.
Los migrantes, que inicialmente respondieron manteniéndose quietos y con los brazos cruzados, pasaron luego al ""contraataque"" lanzando piedras, botellas e incluso las garrafas de gas que empleaban para cocinar.
GARROTE, GARROTE, GARROTE
"Entre las víctimas hay una anciana que cayó al suelo por la presión de los chorros de agua. Algunas de las personas que atendimos presentaban fracturas y 4 debieron ser trasladadas a centros de salud", denunció MSF.
Por su parte, una mujer narró que "a varias de nosotras nos agarraron de los pelos y pegaron con los bastones".
El operativo "fue urgente y necesario luego de que esas familias rechazaran la oferta de la comuna de ser trasladados a un albergue temporario y el riesgo sanitario que significaban las precarias condiciones higiénicas, sin mencionar el peligro que constituía la presencia de garrafas y otros materiales inflamables en una zona rodeada de edificios de departamentos", se defendieron las autoridades.
Pasado el mediodía, y al grito de "Italia verguenza", un grupo de los etíopes y eritreos apaleados se concentraron sobre la Vía Cavour, a metros de la Basílica de Santa María la Mayor, para repudiar lo sucedido.
En este marco, Unicef lamentó que el desalojo "se produjera bajo los ojos aterrorizados de los chicos que habían sido dejados junto a sus familias después del primer desalojo. Estos pequeños, fueron cargados en micros y llevados a la comisaría. Presos del miedo, gritaban y golpeaban los vidrios con las manos".
"Hablamos de personas con status de refugiado, sobrevivientes a guerras, persecuciones y torturas que en ciertos casos obtuvieron la ciudadanía italiana -completó el organismo de la ONU-, tirados a la calle en condiciones inhumanas sin una real alternativa sostenible de parte del municipio",
AUSTRIA MILITARIZA CONTROLES
Militares austríacos participaron ayer por primera vez de manera conjunta con la policía en los controles migratorios en la autopista A13, a 25 kilómetros del Brennero, frontera con Italia.
La operación, que se extendió también a los ferrocarriles, permitió interceptar a bordo de un tren procedente de Bolzano y que iba a Munich a 6 "sin papeles", todos oriundos del Continente negro y que viajaban en la base de un vagón cisterna cargado de gas líquido.
SE VAN DE GRAN BRETAÑA
El Brexit empezó a tener un impacto en la inmigración en el Reino Unido, que se situó en su nivel más bajo en 3 años por el fuerte aumento en la marcha de ciudadanos comunitarios desde el referendo de 2016: según estadísticas oficiales, el número disminuyó en 81.000 personas, para ubicarse en 246.000.