De amistad y traición en el campo

Dentro de las propuestas en el circuito alternativo, la llegada a la cartelera porteña de "Hombres y ratones" es, sin duda, un evento a tener en cuenta. La obra del premio Nobel de Literatura John Steinbeck, nunca antes representada en nuestro país, fue publicada en 1937 en Estados Unidos y no tardó en convertirse en un clásico en aquel país. Además, fue llevada al cine en 1992 por Gary Sinise, protagonizada por John Malkovich.

"Hombres y ratones" ("Of mice and men") llega a El Portón de Sánchez en versión de Lisandro Fiks, quien también dirige la pieza junto a Gustavo Luppi. El texto, que en su versión original relata la historia de dos trabajadores rurales que sin suerte buscan trabajo en diferentes campos luego de ser explotados tras la Gran Depresión, se sitúa esta vez en La Pampa en 1968.

Jorge y Lito son dos peones golondrina que se encuentran en una situación alarmante: han perdido el trabajo que tenían por un incidente causado por Lito (Ramiro Méndez Roy) y ahora deben llegar a un posible nuevo empleo para poder juntar el dinero que desean y concretar el sueño que los mantiene unidos, ser dueños de su propia chacra y no depender más de amos explotadores que los traten como ratones.

Si bien ambos personajes se encuentran en una misma situación frente a los demás, la diferencia entre ellos es notoria. Jorge (Juan Luppi) es un hombre inteligente, pillo y oportunista, y sabe bien que su deplorable situación se debe a los errores cometidos por su compañero Lito, quien no es solo distraído sino que parece no comprender del todo lo que lo rodea y tiene serios problemas para poder expresarse y desenvolverse en un mundo con ciertas reglas básicas de convivencia. Los roles están delineados de forma impecable y muy bien interpretados por ambos actores, quienes desde la primera escena logran captar la atención del público.

UNIVERSALIDAD

La llegada al nuevo campo, los vínculos que se forman con los personajes que allí se encuentran y un devenir de situaciones diversas dan cuenta de que toda amistad puede ser puesta a prueba por la ambición y la conveniencia. El elenco, que se completa con Sandra Criolani, Gustavo Luppi, Lisandro Fiks y Christian Alvarez, logra un homogéneo nivel de composición, lo que le permite al espectador sumergirse desde un primer momento en una historia que parece lejana pero que trata temas tan actuales como universales.

La escenografía (Micaela Sleigh), la música al ingresar a la sala y el diseño de luces (Fiks-Gustavo Luppi) son impecables, y no solo se complementan con la puesta sino que recrean, aun sin ningún actor en escena, el tiempo, el lugar y la temática que luego se manifiestan en la obra.
Con muy buenas actuaciones y una adaptación actual y atractiva, "Hombres y ratones" es una propuesta teatral sólida y ejecutada sin fisuras.

Calificación: Muy buena
Manuel Germano