Se entregaron los Premios Konex 2018

Martín Cabrales recibió el Platino en la categoría "empresarios pyme". "La situación está difícil pero soy optimista", señaló. También hubo un premio de honor para Raúl Alfonsín y una mención especial a los "valores del Papa Francisco".

 

Educación, creación de conocimiento, desarrollo y valores. Esas palabras se repitieron sin cesar anoche por parte de los ganadores de los Premios Konex 2018, que en esta oportunidad se dedicaron al rubro Instituciones-Comunidad-Empresa de la década 2008-2017. El inmenso salón auditorio de la Facultad de Derecho de la UBA -sus casi mil butacas estaban prácticamente cubiertas- fue el marco para la entrega del Konex de Brillante, que esta vez fue compartido por la la empresa estatal INVAP y el presidente del Grupo Arcor Luis Pagani. 

Entre los receptores del Konex de Platino se destacó Martín Cabrales, ganador en el rubro "empresarios pyme". Muy emocionado y rodeado de familiares y amigos, Cabrales recordó a su padre y a su abuelo en su discurso de agradecimiento. Dijo que la situación del país es difícil pero básicamente se declaró optimista respecto del futuro.

El empresario es vicepresidente de Cabrales S.A., fundada en 1941, líder en distribución en bares, confiterías, restaurantes, hoteles y supermercados a nivel nacional. Recientemente se hizo acreedor del Premio ADE al dirigente de empresa: "Son reconocimientos. Caricias. Bienvenidos sean. En un momento difícil para la Argentina en lo que respecta a las pyme pero también para que los empresarios demos mensajes de lo que las cosas pueden llegar a cambiar y sobre todo a futuro. Siempre hay que pensar en las situaciones de mediano y largo plazo. Uno trata de ser optimista", señaló en diálogo con La Prensa.

"La verdad es este premio no lo esperaba, me pareció muy generoso de parte del jurado -enfatizó Pagani-. Lo recibo en nombre de todas las medianas empresas. Es un honor obtener este galardón, además, junto con gente tan prestigiosa como Luis Pagani y que también se recuerde al doctor Raúl Alfonsín".
En efecto, durante la ceremonia se le entregó un Konex de Honor a Alfonsín -lo recibió su hijo Ricardo-. Todos los asistentes del acto se pusieron de pie para homenajear al primer presidente desde el regreso de la democracia en 1983. 
PAGANI
En tanto, el presidente del Grupo Arcor recordó que la industria está atravesando un momento difícil: "Hay que impulsar el progreso. No hay gran nación sin industria".
La noche continuó llena de emociones. Los médicos del Garrahan recibieron su galardón y recordaron a los miles de niños que salvan su vida al año en la institución. Por su parte, Ernesto Sanz recordó su primer discurso frente a Alfonsín en su Mendoza natal cuando dirigía la juventud radical de esa provincia y le "temblaban las piernas".
Hubo más abrazos. Como los que se dieron Magdalena Ruíz Guiñazú y Graciela Fernández Meijide. La ex funcionaria recibió el Platino en la categoría dirigentes sociales.

Otro momento especial fue cuando el padre Guillermo Marcó -histórico vocero de Jorge Bergoglio- recibió la mención especial "Valores del Papa Francisco". "Ante críticas desenfrenadas que se le hacen al Papa, hay que recordar sus palabras, su opción por los pobres. El llama al diálogo y hay que escucharlo", expresó Marcó.
Finalmente, el presidente de la Fundación Konex, Luis Ovsejevich, resumió el espíritu de la noche con unas palabras que llamaron a la unión: "El país necesita de un diálogo franco entre todos los actores sociales. Una interacción que habilite comportamientos solidarios y un compromiso más fuerte con los más débiles".

-