ETA quedó desarmada tras entregar la lista con la ubicación de su arsenal
"La entrega unilateral" de las armas por parte de ETA "es un gran paso", afirmó el ministro del Interior francés, Matthias Fekl, al valorar el desarme en una declaración sin preguntas en la que tuvo palabras de recuerdo a "todas las víctimas".
Barcelona - A casi 60 años de su nacimiento y cinco y medio después de renunciar a la violencia, la organización separatista vasca ETA entregó hoy a las autoridades francesas una lista de los depósitos donde guardaba las últimas armas que tenía en su poder, ubicados todos en Francia.
"La entrega unilateral" de las armas por parte de ETA "es un gran paso", afirmó el ministro del Interior francés, Matthias Fekl, al valorar el desarme en una declaración sin preguntas en la que tuvo palabras de recuerdo a "todas las víctimas" y confirmó que las fuerzas de seguridad galas trabajan para que el desmantelamientos de los arsenales se lleve a cabo "sin riesgo".
El gobierno español de Mariano Rajoy, en cambio, acusó a ETA de realizar "operaciones mediáticas" para "disimular su derrota e intentar sacar rédito político", en palabras del ministro del Interior español, Juan Ignacio Zoido, quien reiteró que los etarras no quedarán impunes por sus delitos, en referencia a los más de 300 presos que cumplen condena y los que podrían hacerlo en relación con las 850 víctimas mortales que dejó la organización en atentados, algunos sin esclarecer.
El presidente del Comité de Verificación Internacional (CVI), Ram Mannikalingam, confirmó el desarme total de ETA a primera hora de la mañana en conferencia de prensa en la localidad vascofrancesa de Bayona, cerca de la frontera con España.
"Es una ocasión histórica, estamos desarmando al último grupo armado que quedaba en Europa", aseguró.
"Con el apoyo de todos, este paso ayudará a consolidar la la paz", añadió el representante de este grupo de seis asesores con experiencia internacional en procesos de paz y seguridad, que fue creado en 2011, cuando ETA anunció el cese de su actividad armada, con la intención de posteriormente desarmarse.
ETA reveló la existencia de ocho "zulos" (escondites subterráneos) que están ubicados en el departamento 64 del país, en los Pirineos Atlánticos, según fuentes de la "lucha antiterrorista" citadas por la prensa española.
En su interior la organización guarda 120 armas, tres toneladas de explosivos, municiones y detonadores, dijeron los "mediadores" Michel Tubiana y Mixel Berhocoirigoin, del grupo civil autodenominado "Artesanos de la paz", que gestó la entrega.
En cada uno de estos arsenales se encuentran una veintena de mediadores a la espera de la llegada de la policía gala, que ya accedió a algunos de ellos, explicaron estas personas.
Mannikalingam sostuvo que "tras recibir la información de la geolocalización de los zulos, ésta fue puesta a disposición de las autoridades francesas, quienes se encargarán de asegurar y recoger las armas".
Posteriormente, la justicia francesa informó que comunicará a la española los diferentes peritajes que se van a realizar del arsenal encontrado en los ocho depósitos de armas y material explosivo de ETA.
El emisario de ETA fue Jean Noël Etcheverry, el mismo activista de la izquierda independentista vasca que comunicó a mediados de marzo al diario francés Le Monde que la organización tenía previsto completar su proceso de desarmar el 8 de abril.
Los testigos de la entrega de la información sobre la localización -que tuvo lugar en la sede del municipio de Bayona- fueron el pastor irlandés Harold Good y Matteo Zuppi, representante del Vaticano, también integrantes de los "Artesanos de la Paz".
Estas personas son las que convocaron el "día del desarme", una serie de actos que pretendían escenificar hoy el respaldo de la sociedad vasca a la iniciativa de ETA.
"El desarme es una buena noticia y así lo deberían entender los gobiernos de España y Francia. El desarme es un paso muy importante hacia la paz, pero no supone la paz. Ahora hay que generar medidas desde el reconocimiento del pasado y el respeto mutuo para vivir sin conflicto. Hay que dar más pasos y abordar otras cuestiones de gran importancia, caso de los presos, para construir una paz justa e irreversible", dijo Mixel Berhocoirigoin, uno de los mediadores que intervino en el acto principal en la plaza Roland Barthes de Bayona, que fue transmitido en directo por la prensa vasca.
"Es sabido que es más difícil hacer la paz que la guerra". Pero, si "el pasado nos separó, el futuro nos debe unir. Hay que poner a las víctimas en el centro del proceso de paz", añadió el "mediador" ante las 20.000 personas que acompañaron el proceso, de acuerdo con cifras de los organizadores.
Todos los partidos políticos vascos menos el Partido Popular (PP) de Rajoy respaldan el proceso de desarme, mientras el gobierno regional del País Vasco, en manos del nacionalista Iñigo Urkullu, se involucró e intercedió para evitar que se frustrara la entrega de armas.
"El desarme de ETA está exceptuado de cualquier épica, pero tiene un significado ético central: que ni una sola de las víctimas debió producirse nunca", remarcó Urkullu, quien admitió que su gobierno "trabajó duro" para que el proceso llegara a buen puerto.
El histórico líder independentista vasco Arnaldo Otegi, quien salió de prisión hace un año, destacó que "el desarme de ETA es una buena noticia", pero "todavía queda mucho por trabajar, entre otras cosas para resolver "la situación de los presos etarras", en referencia a las 360 personas que cumplen condena en cárceles de España y Francia.
La organización separatista vasca ETA, cuyas siglas significan "Euskadi ta Askatasuna" (Patria Vasca y Libertad), nació el 31 de julio de 1959 en el seno de un grupo de jóvenes nacionalistas forjados en la lucha contra la dictadura de Francisco Franco.
El 20 de octubre de 2011 dejó atrás 43 años de lucha armada por la creación de un País Vasco independiente de España y Francia, conflicto que dejó dejó 914 muertos, de los cuales 850 fueron causados por los separatistas, la mayoría en atentados.
La Justicia española solicitará a las autoridades francesas que le facilite el material que se incaute a ETA con el fin de esclarecer los más de trescientos delitos de la organización que aún no están resueltos, aunque con pocas esperanzas de lograr información relevante ya que entienden que las armas estarán "limpias" de pruebas.
El diario español El Mundo destacó que la entrega de 120 armas por parte de ETA implica que no se aportó la totalidad del material que faltaba recuperar del arsenal robado en 2006 en Vauvert, unas 150 de las 350 robadas.