Se realizó la apertura del notable Ciclo de Conciertos Comentados

Estrenos en la Academia Bach

Telemann: Cantata "Das ist je gewisslich wahr", TWV 1183 y Suite en mi menor, TWV 55e10; Bach: Cantata "Herr Jesu Christ, du höchstes Gut". Grupo de Canto Coral (Néstor Andrenacci) y Solistas de la Academia Bach (Mario Videla). El sábado 1ø, en la Iglesia Metodista Central (Av. Rivadavia 4050)

Siempre con el valioso liderazgo de Mario Videla, la Academia Bach de Buenos Aires inauguró su temporada el sábado, con una sesión que incluyó dos estrenos locales y estuvo en parte dedicada a Georg Philipp Telemann, con motivo de conmemorarse este año dos siglos y medio de su deceso. El evento tuvo lugar en el ya tradicional y sobrio recinto de la Iglesia Metodista Central, que estaba totalmente colmado, y tanto desde el punto de vista técnico como en lo que hace al costado estilístico alcanzó por cierto calificado rango.

TELERMANN
Digamos para comenzar que oscurecido a partir del poco menos que revolucionario redescubrimiento de Bach en el Siglo XIX, Telemann fue un compositor formidable y extraordinariamente prolífico. Caracterizado por sus creaciones de inventiva fluida, franca y cromáticamente luminosa, todo apoyado sobre acentuaciones rítmicas de singular efecto y precisión, muchas de sus obras son verdaderas joyas del barroco. La Cantata TWV 1183 (""Es verdaderamente cierto""), que se oyó en la ocasión, con su lenguaje armónico colorido y apacible y sus agraciados diseños melódicos y motívicos bien puede ser inscripta en ese catálogo.

En su traducción, el Grupo de Canto Coral, una de nuestras más relevantes agrupaciones camarísticas, preparado por Néstor Andrenacci, acreditó alma global de notable diafanidad, y abordó con solvente belleza y ductilidad los fragmentos melismáticos y polifónicos.
En primera audición argentina, se escuchó también otro trabajo del mismo compositor alemán. Pero la Suite en mi menor (TWV 55e10), férreamente encorsetada en modelos franceses, pareció antes que otra cosa una pieza agradable y nada más, mero ejercicio de connotaciones híbridas, privado de vena espontánea. 

BACH
Después de las atrayentes acotaciones explicativas del concertador, en la segunda parte de este primer evento del Ciclo de Conciertos Comentados se ofreció una pieza de Bach, también en calidad de primera presentación. Perteneciente a la última época de Leipzig, la Cantata "Señor Jesucristo, el mayor Bien" (BWV 113) exhibe trazos de exquisita frescura, perfecto equilibrio orgánico, y arias y corales de armoniosa factura.

En el transcurso de la velada la soprano Soledad de la Rosa lució medios cálidos y potentes, el barítono Sergio Carlevaris registro bien conformado pero algo monocorde, y el tenor Esteban Manzano, luego de una aparición un tanto inocua (Telemann) mostró gallardos acentos e inflexiones en su aria de la Cantata de Bach, número en el que se destacó el flautista Claudio Barile, instrumentista decididamente brillante por la limpieza, afinación y redondez de su sonido.

El maestro Videla, además de pulsar el órgano con ceñida exactitud, condujo un conjunto de concisa excelencia con impecable fidelidad estética, ataques, cierres y discurso de ajustada precisión y cuidado balance de sonoridad.

Calificación: muy bueno