Allanaron un convento en Entre Ríos tras una denuncia por supuestas torturas

Se trata del convento de las Hermanas Carmelitas Descalzas de la ciudad de Nogoyá. Hallaron "ciertos elementos de tortura y autoflagelación" como látigos y silicios, informó el fiscal.

Autoridades judiciales y policías de Entre Ríos estaban allanando este jueves el convento de las Hermanas Carmelitas Descalzas de la ciudad de Nogoyá, tras la publicación de una investigación periodística que reveló supuestas torturas a las religiosas que habitan el lugar.

La prensa entrerriana informó que el procedimiento se inició con las primeras luces del día e intervenían fiscales y policías de un grupo especial de operaciones de la fuerza provincial.

El portal de noticias Análisis Digital, de la ciudad de Paraná, informó que el procedimiento se llevó a cabo por una investigación de oficio que inició el fiscal Federico Uriburu tras la publicación de un nota publicada por ese medio. 

El párroco de la Basílica Nuestra Señora del Carmen de Nogoyá, Jorge Bonin, se acercó hasta el convento y aguardaba afuera la llegada del obispo Juan Alberto Puíggari.

"Esto es muy doloroso, son cuestiones que no entiendo. El obispo viaja urgente a nuestra ciudad", señaló el sacerdote al portal La Voz de Nogoyá. Uriburu analiza la posible comisión del delito de privación ilegítima de la libertad agravada contra las monjas de clausura que viven en el convento.

El portal de Paraná aseguró que la investigación de las situaciones de exceso que se producirían en el convento demandó dos años y contó con los testimonios de ex religiosas y sus familiares, además de médicos de la localidad que habrían asistido a las monjas.

Según la nota, en el lugar habría castigos permanentes con látigos y las religiosas serían obligadas a usar el cilicio, un elemento de puntas de hierro que se ciñe al cuerpo para generar mortificación.
También se habrían detectado casos de mujeres con cuadros de desnutrición y depresión.

Las reglas de la orden imponen estricto silencio sobre la situación que se vive en el convento.
Según el portal, residirían actualmente en el lugar 18 monjas, la mayoría de las cuales ingresó a los 18 años, aunque algunas estarían allí desde los 16.