El supuesto dueño del auto que usaba Nisman pidió la nulidad de la indagatoria

El empresario Alejandro Picón, acusado por un fiscal federal de ser "testaferro" del ex titular de la UFI-AMIA Alberto Nisman, pidió la "nulidad" de su llamado a indagatoria en la causa en la que está siendo investigado por supuesto "lavado de activos".

La defensa de Picón, a cargo del abogado Alejandro Novak, reclamó además la "nulidad de los exhortos librados a las autoridades de los Estados Unidos", y denunció que éstas fueron engañadas por la Unidad de Información Financiera (UIF).

El juez federal Rodolfo Canicoba Corral llamó a indagatoria a Picón, supuesto dueño del Audi Q5 que usaba Nisman, para el 15 de setiembre. 

"El llamado a prestar declaración indagatoria se funda en prueba ilegalmente incorporada al proceso, y en las propias manifestaciones de Picón al ser escuchado como testigo en otro proceso, lo cual fulmina al pedido de nulidad", sostuvo la defensa de Picón.

Además, argumentó que "las conductas que se tienen por probadas no encuadran en la figura de lavado de activos de origen delictivo".

La defensa de Picón sostuvo que la UIF aportó a la investigación información "de carácter confidencial, que sólo puede ser utilizada con fines de inteligencia, no puede servir como prueba o evidencia y no puede ser agregada a actuación judicial alguna".

Se quejó que "el Tribunal le otorgó carácter confidencial pese a lo cual fue publicada por medios masivos de comunicación".

"Lo que el juez afirma para lograr que las autoridades estadounidenses respondan el exhorto es precisamente la información secreta, reservada, insusceptible de incorporar, no válida como prueba que no puede hacerse valer en el proceso que, precisamente, se pretende judicializar", embistió.

"Se pretende engañar lisa y llanamente a las autoridades judiciales extranjeras en cuanto a las hipótesis investigadas y los hechos probados. El juez emprende una excursión de pesca", sostuvo el escrito.