Caló advierte que si la inflación "se desmadra, vamos a salir a la cancha" a reclamar por una compensación

El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y jefe de la CGT oficialista dijo sobre el aumento de 27,8 por ciento que cerró días atrás para sus afiliados de la UOM no estar "disconforme" y admitió que a la hora de negociar compartió el "anhelo" del Gobierno nacional para ayudar a "que la inflación no se desmadre otra vez".

El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y jefe de la CGT oficialista, Antonio Caló, advirtió que si en los próximos meses la inflación "se desmadra" el gremio saldrá "a la cancha" a reclamar una compensación adicional a la suba salarial de 27,8 por ciento acordada en los últimos días.

"Si la inflación crece saldremos a la cancha. Vamos a peticionar para compensar la pérdida. Primero vamos a esperar que se cobren los aumentos. En septiembre analizaremos", planteó el sindicalista.
Sobre el aumento de 27,8 por ciento que cerró días atrás para sus afiliados de la UOM, Caló dijo no estar "disconforme" y admitió que a la hora de negociar compartió el "anhelo" del gobierno nacional para ayudar a "que la inflación no se desmadre otra vez". 

"El impuesto que más afecta los trabajadores es la inflación, Si esto ayuda, bienvenido sea", argumentó. No obstante, en entrevistas concedidas a los diarios Clarín, y La Nación, previno: "Si esto se desmadra, vamos a salir a la cancha a pedir compensar lo que estamos perdiendo".

Caló señaló que en la paritaria "si el Gobierno no se metía, seguiríamos negociando entre un 21 y 22 por ciento", y sostuvo que "acá los topes los pusieron los empresarios", y recordó las palabras del presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez, acerca de que "no podían pagar más del 20 por ciento de aumento".

De todos modos, opinó que en las paritarias de este año Gobierno y empresarios "tuvieron una postura común, como encadenados".

En relación a la postura del Gobierno acerca de que no homologaría convenios salariales que superaran el 27 por ciento, el gremialista explicó que "si el acuerdo es de partes, y nadie interfirió, tendrá que homologar", y enfatizó que "es así por ley".

Consultado sobre si los trabajadores metalúrgicos tienen malestar con la presidenta Cristina Fernández, afirmó que "los muchachos no tienen malestar contra el Gobierno, al contrario: es contra los dirigentes gremiales. Querían parar por folklore. Querían hacer el paro, y si no conseguíamos nada, no importaba".

Al recordársele sus dichos de que si no conseguía un incremento salarial de 32 por ciento, los trabajadores lo colgarían del Obelisco, bromeó: "Ahora estoy a la mitad del Obelisco". Con respecto al paro nacional para el 9 de junio impulsado por gremios del transporte con la adhesión de las CGT opositoras, Caló ratificó la central obrera oficial que él conduce "no va adherir".

En materia sindical, sobre una posible reunificación de la CGT, evaluó: " Después de las PASO, nos tenemos que dar cuenta. Si es por mí, yo renuncio si los demás hacen lo mismo. A lo mejor hay que hacer una CGT de tres personas porque no hay líderes hoy en día". que a lo mejor hay que hacer una central obrera "conducida de tres personas: una transición, porque no hay líder".

Al preguntársele si seguirá como jefe de la CGT en 2016, estimó que cree "que no" y opinó que "debe venir gente joven".

Consultado sobre que plan tiene en el terreno sindical el precandidato por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli -al que apoya la UOM-, Caló comentó: "Scioli no ha dicho cuál es su plan en el área sindical. Sé (que)será un modelo industrial. Así me lo dijo".