El vetusto Fondo de Reparación
El otrora legendario instrumento fiscal bautizado con el poco cómodo nombre de Fondo de Reparación Histórica del Conurbano Bonaerense es, a esta altura, un recuerdo sepia en las páginas de los diarios. Pero sigue vigente.
"Existe, pero les está jugando en contra. Eran $ 600 millones mensuales, pero quedó como una suma fija", explica Federico Muñoz. Es decir, lo que al momento de su creación, en 1991, eran 600 millones de dólares, hoy son poco más de u$s 100 millones.
El origen tuvo lugar en aquellos años en que se diseñaba la convertibilidad, luego de una hiperinflación furiosa. Pero el motivo, además de económico, fue político. Eduardo Duhalde aceptó dejar la vicepresidencia de la Nación y candidatearse a gobernador sólo bajo la condición de que se creara un fondo que le permitiera asistir económicamente a la provincia más poblada y con mayores conflictos sociales del país.
El Fondo se construyó entonces con el 10% de la recaudación del impuesto a las Ganancias, tan famoso por estos días. Si el porcentaje superaba los $ 600 millones, el excedente sería repartido entre los demás estados provinciales. Lo curioso es que la recaudación creció de tal manera en los últimos años -vía inflación y recomposición salarial constante-, que Buenos Aires siguió percibiendo la suma fija, y el resto de las provincias pasó a cobrar una cifra superior a la del fondo específico.
"Buenos Aires no está recibiendo el 21,7% de las transferencias automáticas de la Nación a las provincias, que es lo que le correspondería, sino el 19,5%. Sigue estando, pero en lugar de ser un fondo de reparación, es un ancla".