Las escuelas bonaerenses crearán un plan para cubrir las ausencias de los maestros en los paros
Se trata de un plan de continuidad de enseñanza que eliminará las horas libres para los alumnos durante las manifestaciones o enfermedades de los docentes. Además se eliminarán los exámenes de ingreso.
Los colegios bonaerenses deberán fijar antes del primer trimestre de cada año lectivo pautas para asegurar la continuidad de la enseñanza en caso de paros docentes, ausencia del maestro o enfermedades, de acuerdo al nuevo Reglamento de Escuelas, informó hoy la cartera educativa provincial.
El vicepresidente del Consejo General de Educación (CGE) bonaerense, Daniel Lauria, destacó entre los ejes del Reglamento que reemplazará al vigente desde 1958, la creación del Plan de Continuidad Pedagógica.
Ese plan establecerá "los mecanismos sobre cómo actuará la institución para garantizar el aprendizaje de los alumnos" y la "eliminación de los exámenes de ingreso y del pase al turno tarde a los alumnos que repiten".
"Cada institución deberá establecer pautas para dar continuidad a la enseñanza de los alumnos en los casos en que por ejemplo tenga que faltar por una enfermedad, el ausentismo de un docente o ante días de paro", resaltó Lauria.
Asimismo, dijo que el Reglamento propiciará la organización de Centros de Estudiantes y la participación de los padres y no docentes en la comunidad escolar. El funcionario del CGE precisó que el Plan deberá proponer "una salida a esa situación, ya sea realizar una determinada actividad como ver una película, o plantear un trabajo grupal relacionado con lo que se estaba viendo hasta el momento en la materia".
El director general de Educación bonaerense, Mario Oporto ratificó que el Reglamento de Escuelas "eliminará totalmente las horas libres de las aulas", en relación a la nueva normativa debatida y consensuada por directivos, docentes y representantes de los sindicatos docentes.
La reforma fomenta, además, la creación de Centros de Estudiantes en la Provincia para estimular la participación de los alumnos en los debates, e impulsa la creación de un Plan de Prevención de Riesgo para problemáticas que se pueden presentar dentro y fuera del establecimiento.
Elimina, al mismo tiempo, reglamentaciones que estaban fuera de uso pero que eran parte del Reglamento General de Escuelas, como los exámenes de ingreso y la obligatoriedad de que los alumnos repitentes concurran al turno tarde. La norma incorpora la adhesión total a la Declaración de los Derechos del Niño, sancionada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1959.
Oporto destacó que la reglamentación escolar "se ha venido trabajando junto a los gremios y los docentes desde hace casi tres años, porque entendemos que hay que dejar atrás la actual normativa ya que hoy hay otras concepciones sobre el rol de la escuela, la sociedad y la familia, que necesariamente deben incorporarse al sistema educativo".
El funcionario diferenció, entre otros aspectos, que la nueva normativa escolar pondrá la responsabilidad en la obligatoriedad de la enseñanza en el Estado y no en la familia como la anterior.